Atlético perdonó demasiado y lo pagó caro

A dos minutos del final, Leandro Díaz arruinó lo que podría haber sido un debut inmejorable de Guiñazú en el banco.

ADELANTE. Augusto Lotti compartiría la delantera junto a Ramiro Ruiz Rodríguez. ADELANTE. Augusto Lotti compartiría la delantera junto a Ramiro Ruiz Rodríguez. Fotos de Diego Riquelme (especial para La Gaceta)

Sabor amargo. Sin vueltas. Porque Atlético pudo golear y perdió dos puntos sobre el final. Porque estuvo cerca de ser el inicio soñado de un nuevo ciclo, pero el agónico gol de un ex lo dejó con las manos semivacías.

El nuevo “Decano” de Pablo Guiñazú debió conformarse con un empate 1-1 en su visita al Estudiantes de Ricardo Zielinski en el coqueto estadio UNO, un resultado que en otras circunstancias no hubiera dolido demasiado.

Pero sucede que Atlético jugó un primer tiempo para ilusionarse: ganaba desde el amanecer del partido, dominaba a voluntad y hasta había sido despojado de un legítimo segundo gol.

En el complemento, Estudiantes se vino encima, los cambios no entraron bien y desperdiciaron cuatro ocasiones claras. Simplemente, la visita perdonó demasiado.

ACTIVO. ”Cholo” se mostró muy intenso en cada jugada. Imitó con su cuerpo cada movimiento en todas las jugadas. ACTIVO. ”Cholo” se mostró muy intenso en cada jugada. Imitó con su cuerpo cada movimiento en todas las jugadas.

Pareció que ese gol en contra de Agustín Rogel antes de los cuatro minutos era una señal de la buena estrella del eléctrico Guiñazú y de que los planetas en la fresca noche de La Plata se habían alineado a favor del “Decano”.

CRECIENDO. Partido a partido, Leonardo Heredia, observado por Cristian Erbes, se muestra más cerca de su mejor versión. CRECIENDO. Partido a partido, Leonardo Heredia, observado por Cristian Erbes, se muestra más cerca de su mejor versión.

Esa dosis de fortuna facilitó el “modus operandi” del equipo del “Cholo”. Porque Estudiantes se desordenó, algo poco común en los conjuntos de Zielinski. Ojo: no hay que quitarle mérito a Guiñazú. Que tomó la decisión de sostener el mismo once que le ganó a Argentinos y que supo transmitir a sus hombres el mandato de la intensidad y de la concentración que lo caracterizaron como jugador.

El mejor jugador que tuvo el “Pincha” fue su público, su barra “Los Leales”, comenzaron a pedir porciones extras de “huevo” para revertir la historia.

Él no perdonó: tras el gol, Leandro Díaz no elaboró ningún festejo, por respeto a su ex club. Sí se persignó y salió corriendo hacia la mitad de la cancha para apurar el reinicio del juego e intentar ganar el partido. En unos meses, el delantero debe volver a Tucumán, ya Atlético es dueño de su pase. Él no perdonó: tras el gol, Leandro Díaz no elaboró ningún festejo, por respeto a su ex club. Sí se persignó y salió corriendo hacia la mitad de la cancha para apurar el reinicio del juego e intentar ganar el partido. En unos meses, el delantero debe volver a Tucumán, ya Atlético es dueño de su pase.

Por entonces, la defensa del local era un tembladeral. Y el “Decano” estuvo a punto de duplicar su ventaja. ¿Qué le pasó al asistente Javier Uziga que levantó la banderita para indicar un offside solo existente en sus retinas? Tanto en el inicio como en la resolución, el asistidor Ramiro Carrera y el goleador Augusto Lotti estaban habilitados.

Al árbitro Hernán Mastrángelo, además, se le pasó mostrarle la roja a Jaime Ayoví (patadón a Marcelo Ortíz).

En el entretiempo, Zielinski, llevado por las circunstancias, movió la banca (buen ingreso de Franco Zapiola, un juvenil irreverente) y su equipo se plantó unos metros más adelante. Pero el frenesí del “Cholo” en el corralito siguió teniendo su adecuada traducción en el campo de juego: dinámica y despliegue, presión bien alta.

Sobre la hora de juego, hubo tres goles perdidos en tres minutos: Lotti, Ramiro Ruiz Rodríguez y Felipe Campos. Enseguida, Cristian Lucchetti empezó a ser protagonista.

El “Decano” perdió la pelota. Probablemente, Guiñazú pagó derecho de piso, terminó poniendo en campo a varios jugadores de buen pie, pero menos fibra: Joaquín Pereyra, Ciro Rius, Óscar “Junior” Benítez… Y Cristian Menéndez, que hace extrañar horrores a Javier Toledo, erró uno de esos goles que llevan “hecho” como calificativo.

En la jugada que siguió, el oportunismo que le faltó al “Polaco” lo tuvo Leandro Díaz con esa media tijera que se metió junto al palo, a los 88. Con el espíritu siempre presente de Osvaldo Zubeldía, Estudiantes, salvó un punto a puro centro, empujando, metiendo a “lo Estudiantes” y a “lo Zielinski”.

Quizá ese fue el principal pecado de Atlético: estaba para golear y se expuso a lo que finalmente sucedió. Tal vez en el complemento las piernas sintieron las 48 horas de menos de descanso que tuvieron en relación a las de su rival (con el añadido del viaje).

Fue una pena, no solo por los puntos perdidos, sino porque para el “Cholo” hubiera sido su noche soñada, un debut con victoria ante aquel entrenador a quien está llamado a hacer olvidar o, al menos, a que ya no sea tan extrañado por el mundo “decano”.

Como en los viejos tiempos Acosta fue la figura de la cancha

En los últimos dos partidos Atlético levantó considerablemente el nivel que venía mostrando. En coincidencia con eso, Guillermo Acosta, demostró que sigue más vigente que nunca.

El tucumano fue una de las figuras en el triunfo por 4-3 del domingo, con Martín Anastacio en el banco, mientras que ayer, con Pablo Guiñazú como DT fue la figura de la cancha, aportando despliegue, juego y por sobre todas las cosas, sacrificio.

“Nos vamos con bronca, estábamos haciendo un buen partido. El primer tiempo fue muy bueno”, analizó “Bebe”.

La falta de efectividad volvió a decir presente en el equipo, luego de los cuatro goles del domingo, anoche tuvo varias, pero erró, es más el único gol “Decano” fue en contra. “Si no haces un gol, después lo sufrís, nos faltó tener la mente más fría para aumentar la ventaja”, explicó Acosta.

De cara al próximo partido, el volante sostiene que lo más difícil ya se consiguió. “Volvimos a tener la confianza que nos faltaba en otros partidos”, concluyó.

CORAZÓN "DECANO"

Vuelven hoy a Tucumán

A las 8.30 el plantel regresará vía aérea hacia la provincia. Mañana desde las 9, Pablo Guiñazú entrenará a los suyos pensando en el partido ante Patronato.

Hicieron fila para saludar al “Ruso”

Antes del inicio del partido, los jugadores “decanos”, liderados por Cristian Lucchetti, pasaron por el banco de suplentes local para saludar a su ex entrenador, Ricardo Zielinski (foto). El “Ruso” dirigió 124 partidos y consiguió poco más del 50 por ciento de los puntos, además de haber jugado una final de Copa Argentina y quedar entre los ocho mejores de América, durante ese lapso.

Atlético perdonó demasiado y lo pagó caro

Los Juveniles de AFA en la recta final

El viernes los planteles de la Cuarta, Quinta y Sexta viajarán hacia Avellaneda para enfrentar a Independiente por la fecha 12 del torneo. Mientras tanto, las divisiones Séptima, Octava y Novena recibirán al “Rojo” en el complejo José Salmoiraghi desde las 9. La próxima semana Atlético cerrará el torneo enfrentando a Defensa y Justicia.

Mussis, disponible para volver

El volante, Franco Mussis, cumplió ante Estudiantes la suspensión de un partido que tenía por haber llegado al límite de amarillas contra Argentinos. Estará en condiciones de jugar ante Patronato, si Guiñazú así lo dispone, por la próxima fecha de la Liga Profesional. Cristian Erbes continúa en capilla, con cuatro tarjetas. Más atrás aparecen Felipe Campos, Guillermo Acosta, Marcelo Ortiz y Ramiro Carrera con tres amarillas.

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