Rugby: en su propio camino

No hace falta ser una luz para darse cuenta de que a Emilio Valdez lo apasiona el rugby: le dedica buena parte de su semana, entre su rol de director del Centro de Rugby de la URT, entrenador del seleccionado tucumano femenino y entrenador asistente del seleccionado femenino nacional. Pero a la par de esa gran pasión tiene otra. “La música”, responde Emilio, que en cierta manera terminó siendo como un director de orquesta para la Preintermedia de Universitario. Más allá del objetivo deportivo que le cabe a cualquier equipo que sale a una cancha, estaba el de desarrollar una sintonía de grupo, un espacio donde todos, sin importar su edad, su puesto o los minutos que les tocara jugar, encontrara su motivación para seguir entrenándose y sintiéndose pieza importante de algo.

Y así, como una consecuencia, llegó el éxito deportivo: el fin de semana, el equipo “B” de las “Serpientes” derrotó 18-13 a Lawn Tennis en la final de la Copa de Oro de Ascenso de la Zona 4, en la que compitieron las Preintermedias de los equipos de Primera. Un try a los 45 minutos del segundo tiempo desató el festejo para los de Ojo de Agua en cancha de Natación.

“Universitario tiene un plantel de Preintermedia fabuloso, con muchos chicos de entre 20 y 23 años que volvieron al club después de este período pandémico tan espantoso. Cuando me puse a la cabeza, mi misión no era ganar un campeonato sino recuperar toda esa juventud tan linda que no estaba yendo, que no estaba encontrando su lugar dentro del club. El cual, vale recordar, es social y deportivo, en ese orden”, resume Valdez.

La “Pre” de Universitario perdió un solo partido en el año. “Pero lo importante es que semana a semana fue ganando más jugadores. Y todas las semanas tuvimos algún amistoso contra equipos del Ascenso. Porque a la par del equipo que jugaba el torneo, tuvimos un segundo equipo con ganar de jugar y estar, al margen de que no fuera un campeonato. Se entrenaban igual, y así pudimos sostener un hermoso plantel que vivió cosas muy lindas”, agrega Valdez.

Detrás de ese proyecto mancomunado hubo un staff que Valdez califica como “maravilloso” y que se completa con Patricio Figueroa, Rodrigo Pereyra, Sebastián Fiad, “Fredy” Del Pero y “Willy” Beale. “Un grupo de amigos, con ganas de transmitirles a estos chicos lo lindo de este deporte y del club. Y también de enseñarle a seguir buscando ganarse un lugar en el plantel superior, sea en Primera o en Intermedia”, explica.

Si bien el plantel se compone de una gran base de jugadores que apenas pasan la barrera de los 20 años, Emilio rescata la figura del capitán Fernando Brandán (40 años) como símbolo de esa sintonía capaz de amalgamar piezas de edades diferentes. “Entre tantos chicos, encuentra su lugar un jugador que aún tiene ganas de jugar y está dispuesto a bancarse algunos golpes por el simple hecho de juntarse y compartir con chicos a los que doble en edad”.