Por Daniel Salvador
24 Julio 2021
La falta de respuestas positivas y las malas noticias de los últimos días terminaron con la paciencia de los trabajadores del ingenio San Juan. Luego del lapidario informe sobre el estado de la fábrica y la conclusión de que este año no molerá -dejó al descubierto la desinversión y el falso anuncio de que el 20 de julio iba a arrancar la zafra- el juzgado que entiende el concurso preventivo del Complejo Agroindustrial, resolvió ordenar a Constructora del Tucumán SA a cargo del cram down o salvataje de la empresa, que “rinda los arriendos de julio de 2021”, y que el 60% de los ingresos sean destinados al pago de la cuantiosa deuda salarial que mantiene con el personal.
Además, intimó a la sociedad anónima del Grupo Omil a rendir cuenta de los ingresos en dinero o en bolsas de azúcar por todos los arriendos de este año, y describir los que faltan arrendar.
Si bien la respuesta del Juzgado en lo Civil y Comercial Común de la VII nominación, a cargo de la jueza Mirta Estela Casares, era una parte de los reclamos presentados por los trabajadores en los últimos tres años, no alcanzó ahora para tranquilizar los ánimos de los asalariados que, a través de un nuevo escrito, “instaron” a la magistrada a que le retire la administración a Constructora SA por todas la irregularidades e incumplimientos constatados, y le reclamaron que “no debe hacer ojos ciegos a la realidad”.
“Un pacto”
En paralelo, José Campos, secretario de las bases del ingenio San Juan, con el acompañamiento de dirigentes de la Fotia, denunció una probable connivencia de la jueza Casares con Constructora SA. Al respecto, el secretario general y actual legislador, Roberto Palina, adelantó que pedirá el juicio político para la magistrada del concurso. Los trabajadores denuncian que “hay un pacto con la administradora, para que una sobrina de la funcionaria judicial trabaje como jefa de planta”.
“Por este hecho antiético y por las dilaciones en resolver sobre esta parte del salvataje de la empresa, cuando está a la vista la incapacidad e insolvencia del Grupo Omil para manejar el ingenio, vamos a pedir el juicio político a la jueza por causar más daño económico”, resaltó Palina.
Cabe recordar que hace pocos días el secretario de Fotia había advertido que, frente a la abultada deuda salarial y de aportes jubilatorios y sindicales, evaluaban pedir la quiebra del Complejo Agroindustrial San Juan SA, hoy en concurso preventivo.
“Una vez más”
Las comisiones directivas de Fotia del San Juan enviaron la nota al juzgado a cargo del concurso después de conocer el informe con fotos del perito José Katz, sobre el estado ruinoso de las instalaciones de la fábrica. Esa conclusión es que “no está en condiciones de funcionar”, y es evidente “a la vista”, y que todas las maquinarias requieren “ser intervenidas con urgencia”.
Con el patrocinio del abogado Raúl Cossio, y a partir de el informe del perito, “venimos a solicitar una vez más que Constructora del Tucumán SA sea apartada de la administración de la concursada”.
Se remarca en el escrito de los obreros que el informe técnico “desnudó” la ficción de Constructora SA, de que el ingenio está en buenas condiciones y que el 20/07 iba a iniciar la zafra. “Es increíble que pese a tantas denuncias sobre el abandono de la fábrica, lo que produjo el deterioro en forma manifiesta, se mantenga esta administración”. “Lo de Constructora SA es una mentira pura y simple. Luego de ver los informes del perito y nuestros continuos reclamos, la situación no admite que se la oculte”.
Apuntan que “si le miente (Constructora SA) a la Justicia, y tiene conocimiento (la jueza) de la falsedad y no hace nada, la situación adquiere mayor gravedad, ya que el daño no sólo lo hace la gerenciadora”. Y reitera: “Constructora SA debe ser apartada inmediatamente de la administración”.
En la presentación, los trabajadores de FOTIA repiten la denuncia de “hace tiempo” que la empresa se queda con el canon de los arriendos de tierras del Complejo Agroindustrial, y “no destina ni un peso” a reparar la fábrica o a pagar deudas salariales”. Y también reitera la queja: “la Justicia lo dejó seguir”. Y denuncian: “no se entiende que una empresa que no lleva contabilidad, no rinde cuentas de aportes jubilatorios, de obras sociales, cuota sindical, farmacia, cánones de arriendos de tierras, que abandonó la planta fabril..., continúe al frente de la gestión”.
Al respecto, revelaron que Constructora SA sembró y trilló 500 hectáreas de la concursada con trigo, y que la empresa embolsó “todo lo producido”. ¿La Justicia va a seguir permitiendo que la administradora continúe enriqueciéndose con la salud y el esfuerzo de los trabajadores del ingenio San Juan”?
Volvió la sobrina
Silvia Casares y su disgusto con obreros
“Volvió en 2020 al ingenio para trabajar en el laboratorio, y sin que lo sepa nadie, fue presentada como jefa de planta”. Así relató a LA GACETA el secretario de Fotia, José Campos, la reincorporación de Silvia Natividad Casares, la sobrina de la jueza del concurso, al San Juan. “Por un problema con ella -mal trato- el año pasado, pedimos a la administradora su traslado. Dijeron que fue un arreglo con la jueza; pero luego lo negaron”.
20 años de zafras irregulares
1- En 2001, en plena crisis económica en el país, el ingenio y destilería de alcohol propiedad del Grupo Jorge entró en concurso preventivo.
2- La Justicia resuelve un plan de salvataje (cram down) y transfiere la totalidad de los activos y pasivos a la empresa Constructora del Tucumán SA (Grupo Omil).
3- El salvataje quedó en stand by casi 17 años, ya que los propietarios obtuvieron una medida cautelar, al objetar la adjudicación y pedir su nulidad.
4- En esos 17 años, hicieron moler el ingenio, vendieron las producciones y dejaron abultadas deudas el Grupo Jorge y los sucesivos arriendos. En 2018 molió 8 días.
5- En 2019 la Justicia local le devolvió la administración a Constructora SA, “por el estado de abandono del ingenio”. El año pasado molió 5 días por falta de caña.
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