Una arriesgada apuesta que funcionó con los tucumanos

La apuesta era arriesgada; las posibilidades de que fuera un éxito notable o un rotundo fracaso eran las mismas. Pero, al menos en Tucumán, lo visto sobre el escenario del teatro Mercedes Sosa en la noche del jueves gustó.

El desafío partía de que el público de Valeria Lynch dista bastante de los seguidores de Attaque 77, la banda punk que lidera Mariano Martínez (si bien es cierto que el grupo de estos últimos ya no está constituido por ningún adolescente, sigue habiendo una marcada diferencia de perfil con las fanáticas de la rubia, con mujeres mayores de 40 años en su mayoría). Aún así, la pareja logró encontrar un acertado equilibrio en el repertorio elegido que dejó conformes a todos.

Ya cuando anunciaron que tenían una relación sentimental, hace poco más de un año, hubo sorpresa. Después vino la pandemia de coronavirus, que trajo el confinamiento y los obligó a pasar 10 meses encerrados, juntos y compartiendo casa. Entonces surgió la idea de este show, que presentaron en la sala más grande de la provincia, aún con aforo reducido al 30%. “Nos pusimos a practicar y armamos estas versiones de cuarentena”, le contaron a un público fiel.

Era evidente que la gran mayoría de los asistentes -si no fueron todos- estaba allí por Valeria. Pero Mariano supo ocupar con altura ese segundo lugar en las preferencias de la platea: sonreía cada vez que una voz femenina gritaba un “¡Valeria, te amo!”; compartía anécdotas divertidas acerca de la pareja (incluso jugaron a que ella lo gastara) y les aportaba con sus guitarras un toque de rock a las conocidas baladas románticas de la blonda.

Tampoco es que hayan caminado por la cornisa; más bien, fueron a lo seguro en su actuación. A lo largo de dos horas, hicieron un recorrido por los clásicos de toda la carrera de Valeria y Mariano también interpretó algunos temas de Attaque 77 (en el caso de “Arrancacorazones”, lo cantaron juntos). Eso sí, los más populares y conocidos, como para no desconcertar a nadie. Hubo, además, una versión propia de “Un viejo blues”, de Pappo, que tuvo muy buena aceptación de quienes asistieron a la sala.

“Íntimo”, el nombre de la gira, describe a la perfección el espectáculo. Y es que cuando el talento sobra, no se necesita de mayores recursos para un buen resultado. No más que dos banquetas sobre el escenario desnudo, un par de guitarras que Mariano fue alternando y las voces de ambos bastaron para que la gente los ovacionara con sus aplausos y se retirara con una sonrisa.

Elogios y agradecimiento

La experiencia de Edu Kraso

Como telonero de "Íntimo", se presentó en el Mercedes Sosa el tucumano Edo Kraso. "Además de tener el placer de ser artista invitado de Valeria Lynch y Mariano Martínez, después de conocerlos en persona los admiro y respeto aún mucho más que antes. Me recibieron con la humildad y la simpatía que solo los gigantes como ellos la tienen. Estoy enormemente agradecido de poder compartir escenario con dos grandes personas y artistas de nuestro país a nivel internacional. Se merecen todo el éxito", escribió ayer el cantante local en sus cuentas sociales.