Por Álvaro José Aurane
01 Abril 2021
El acuerdo alcanzado por el Gobierno nacional y el sector macrista de Juntos por el Cambio para postergar un mes la celebración de las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorios (PASO), y consecuentemente también los comicios generales de fin de año, no encontró eco entre los referentes de la oposición tucumana.
El martes pasado, en una reunión en la Casa Rosada, el presidente del bloque del Frente de Todos en la Cámara Baja, Máximo Kirchner, planteó la propuesta oficial de aplazar las PASO de agosto para septiembre y las elecciones de medio término de octubre para noviembre. La decisión de avanzar con esa propuesta, según había dado cuenta el diario La Nación, se había tomado en un almuerzo ese mismo día, en el que los comensales fueron el presidente Alberto Fernández; el jefe de Gabinete Santiago Cafiero; el titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa; el ministro del Interior, Eduardo “Wado” de Pedro, y Kirchner.
Los que habrían dado un “quiero” condicionado fueron Cristian Ritondo, presidente del bloque del PRO en Diputados; y Jorge Macri, intendente de Vicente López. Ellos pidieron establecer una serie de parámetros sanitarios específicos, como el porcentaje de camas ocupadas en las terapias intensivas y las tasas de contagios y de mortalidad. La decisión generó revuelo en la oposición. La UCR y la Coalición Cívica no tardaron en desmentir cualquier acuerdo. Más tarde, Jorge Macri aclararía por Twitter que todo se había tratado de un planteo informal del Gobierno y que su respuesta había sido llevar la cuestión debía trasladarse al Congreso.
“Improvisados”
El diputado radical José Cano, justamente, planteó que, “si la Nación planea no cumplir con los plazos estipulados por la Ley 26.571, debe llevar esa cuestión al ámbito natural de discusión, que es el Poder Legislativo. Una ley electoral no puede modificarse por decreto de necesidad y urgencia, sino mediante otra ley”.
El parlamentario se ha manifestado en favor de las PASO como la instancia para dirimir las candidaturas de Juntos por el Cambio en Tucumán. Cuenta con el respaldo del interventor del distrito, el concejal José “Lucho” Argañáraz, quien ha manifestado pública y reiteradamente su oposición contra el acuerdo con Fuerza Republicana que impulsan los intendentes radicales del oeste Mariano Campero (Yerba Buena) y Roberto Sánchez (Concepción).
“Cambiar las reglas de juego electorales afecta la legalidad en la Argentina. Sobre todo sin son elecciones, que son las reglas de juego de la democracia. El Gobierno nacional, que sólo provoca incertidumbre con su política internacional, ahora también genera incertidumbre nada menos que con los comicios. Son el Gobierno de la improvisación”, fustigó.
“Barbaridad”
No menos crítico de una eventual postergación de las primarias y de los comicios generales fue el legislador Ricardo Bussi, titular de FR. “Cambiar las reglas de juego en medio del partido es una barbaridad”, sentenció.
“Nosotros no somos ajenos a la pandemia que vive la Argentina y el mundo. Pero lo alarmante es que este Gobierno nacional, que ha buscado alternativas para el retorno de los chicos a los colegios, no intenta buscar variables para celebrar las elecciones, sino que directamente quiere postergarlas o eliminarlas”, contrastó el titular del bloque de FR en la Legislatura.
“El Gobierno podría habilitar otros sistemas de votación, como el sufragio electrónico o la boleta única, que agilizarían el acto electoral, pero no tiene ninguna intención de darle transparencia al proceso. También se ha propuesto habilitar otros centros, como los clubes deportivos. Y hasta que se vote durante dos días. Por caso, el Colegio de Abogados de Tucumán celebró elecciones con protocolos sanitarios y no hubo inconvenientes. Pero al kirchnerismo sólo le importa especular con que haya alguna mínima mejora económica que les amortigüe la paliza que se viene en las urnas”, afirmó.
“Seriedad”
“No es serio mover las fechas de las elecciones en el año de las elecciones. Pero mucho menos serio, y muchísimo más peligroso, es movilizar a la totalidad de la sociedad argentina en medio de semejante pandemia”, manifestó el intendente de San Miguel de Tucumán, Germán Alfaro.
El líder del Partido por la Justicia Social, donde la diputada Beatriz Ávila ya anticipó que será candidata a senadora, ratificó su postura en favor de la supresión lisa y llana de las PASO para este año. “Me parece llamativo que se publicite tanta preocupación oficial por extremar los cuidados durante la Semana Santa, cuando una porción de la sociedad hará miniturismo, y que sin embargo a nadie le inquiete que se convoque a toda la ciudadanía a concurrir a votar el 8 de agosto. ¿Cómo pueden estar pensando en celebrar primarias cuando ni siquiera hay vacunas para todos los ciudadanos en situación de riesgo?”, inquirió.
Plazos
La Ley de Democratización de la Representación Política, la Transparencia y la Equidad Electoral (26.571) establece en su artículo 20 que las PASO deben efectuarse “el segundo domingo de agosto” del año en que corresponda celebrarlas. Este año corresponden al 8 de agosto. Sobre la base de esa disposición normativa, la Cámara Nacional Electoral elaboró el cronograma que se dio a conocer a principios de este mes.
Sin embargo, lo que todavía no ha ocurrido es el efectivo llamado a las urnas, que debe realizar el Poder Ejecutivo Nacional. La mencionada ley nacional determina, también en el artículo 20, que: “La convocatoria a elecciones primarias la realizará el Poder Ejecutivo nacional con una antelación no menor a los noventa (90) días previos a su realización”.
A partir de esta normativa, el 10 de mayo es el último plazo que tiene la Casa Rosada para dictar el decreto de convocatoria. Y, por ello mismo, es el límite temporal que tiene el oficialismo para lograr que el Congreso de la Nación modifique la Ley 26.571, ya sea para fijar una nueva fecha o para anular las PASO de este año.
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