Diseño moderno, con técnicas tradicionales

Desde un mantel hasta un sofá. Desde una vela aromática a un juego de comedor con sillas tejidas a mano. Desde un juego de platos de cerámica hasta copas sofisticadas de cristal. Con todas las opciones que se han sumado este año al menú de Tafí del Valle, podemos decir que esta es una temporada con una fuerte impronta “deco”.

Al menos seis tiendas de diseño y decoración se han instalado, número que sorprende si se lo compara con el único local que había el año pasado, un “pop-up store” dentro del tradicional bar La Quebradita.

Lo nuevo no es sólo la cantidad de opciones que se han sumado, sino también el contenido de estas tiendas. Cada una con su estilo, busca utilizar materiales nobles, tradicionales, naturales y autóctonos, sumándoles un diseño actual. “Esta temporada se renovó el diseño en Tafí. Vinieron casas con tendencia, con lo que se está usando”, analiza la diseñadora Eugenia Dumit, de paseo en los Valles, y que recorrió el virtual “camino del diseño” de Tafí.

Los propios emprendedores están sorprendidos. Nadie se ha puesto de acuerdo en armar este “circuito”, sino que se ha dado espontáneamente. Lo mejor es que cada tienda tiene su propia selección, muy distinta de las otras, pero coinciden en esta intención de revalorizar lo autóctono con los gustos y las estéticas actuales.

“Los locales tienen mucha variedad de artículos, elementos de diseñadores que hacen objetos exclusivos para los locales y también marcas conocidas, más industriales. Encontrás desde cortinas de baño, velas, mesadas de cocina, objetos deco, almohadones, caminos de mesa, lámparas. Un poco de todo. Podés equipar toda tu casa con lo que encontrás en esas tiendas. La gente quiere tener la casa linda, aggiornada, con materiales del lugar pero que tengan mucho más diseño que las cosas más tradicionales”, describe Dumit.

Técnicas y diseño

Claudia Röhmer-Litzmann y Virginia Arrieta, que abrieron este camino el año pasado, han ampliado su local y han invitado a proveedores y diseñadores externos a vender sus productos. Se pueden encontrar desde mármoles hasta sillones, textiles y pequeños objetos de regalería. “Nos sorprendió el año pasado el interés, pero no sólo de los veraneantes, que son los consumidores principales, sino también de los lugareños. A ellos no les llegaban estas propuestas, el diseño no lograba ‘saltar’ la montaña, entonces ahora lo aprovechan”, cuenta Claudia. Las dos socias encontraron una manera de incorporar las técnicas tradicionales de la cestería de Santiago del Estero con morfologías más contemporáneas. “Hay una cuestión de proporciones y de colores, por ejemplo, que si uno les indica a los artesanos qué es lo que quiere y lo diseña, ellos lo hacen perfectamente”, contó Röhmer-Litzmann.

Algo similar hace Eugenia Cáceres, que instaló su tienda de diseño en la nueva galería Inti del Tafí. “Los colores y los materiales naturales y crudos son la tendencia actual. Materiales nobles como el cuero y la madera, cosas hechas a mano, pero no con el típico diseño más autóctono sino más moderno. Nosotros incorporamos cestería de Santiago del Estero y del Litoral, pero también tenemos proveedores de Córdoba, Buenos Aires, Mendoza; todo artesanal, nada seriado”, describe.

Como tantos otros, las socias María del Carmen Lazarte y Mariana Maris trajeron los productos de su local de Yerba Buena a Tafí. “Este año cambiamos las vacaciones en la Costa por la montaña. Nos la jugamos para mostrar las cosas que hacemos en nuestro taller”, contó Maris. En su taller se especializan en objetos decorativos de cerámica, y en utensilios y vajilla del mismo material. “Por la pandemia mucha gente invirtió en sus casas, en ponerla linda, yde nuestros productos les atraen los colores y los formatos, que son únicos”, describió.

Las hermanas Mayra y Silvana Brufau también instalaron su tienda en la galería nueva, que sin querer se ha perfilado como un paseo del diseño y la decoración y se suma a este circuito que incluye locales en la villa y en las afueras de Tafí. “Nosotras nos especializamos en muebles y objetos tejidos, con todo tipo de materiales, pero siempre tejido. Usamos hilo de papel, yute y también sintéticos. Para nosotras ha sido una apuesta para visibilizarnos más que para vender, pero vemos que la gente está interesándose en incorporar estas nuevas cosas a su casa”, finalizó.