Una "ola celeste" en el Monumento al Bicentenario

En la Dirección de Tránsito calcularon que asistieron cerca de 10.000 personas a la “Marcha por la vida” en la Capital.

COMO EN 2018, PERO CON BARBIJOS. Las postales y las consignas de la manifestación son similares a las de años anteriores, salvo las características -no siempre cumplidas, como las distancias- que marca la pandemia de covid. la gaceta / fotos de DIEGO ARAOZ COMO EN 2018, PERO CON BARBIJOS. Las postales y las consignas de la manifestación son similares a las de años anteriores, salvo las características -no siempre cumplidas, como las distancias- que marca la pandemia de covid. la gaceta / fotos de DIEGO ARAOZ

Tucumán no se quedó atrás en la convocatoria nacional en contra de la legalización del aborto. La “Marcha por la Vida”, que partió desde distintos puntos de la Capital y alrededores, tiñó de celeste el Monumento al Bicentenario con pancartas, pañuelos y banderas argentinas. Según los referentes de la manifestación, asistieron a pie y en auto unas 40.000 personas. Sin embargo, en la Dirección de Tránsito calcularon la cuarta parte a partir del corte que realizaron entre las calles 12 de octubre y Paso de los Andes, sobre la avenida Mate de Luna, desde las 17 de ayer.

Dijeron presente en las cercanías del Parque Avellaneda cientos de familias, jóvenes, agrupaciones religiosas y políticos. Unas de las principales consignas repetidas fueron “Sí a la vida, no al aborto” y “No será ley”, en referencia al proyecto que busca legalizar, al igual que en 2018, la interrupción del embarazo hasta la semana 14 de gestación.

Referentes de la oposición estuvieron cerca del epicentro de la marcha, a la par del monumento. “Pretender legalizar el aborto es descartar argentinos. ¿A quién representarán los diputados? ¿A la gente que sale a marchar y a nuestra Constitución, o a lo que impone el presidente y Vilma Ibarra (secretaria de Legal y Técnica de la Nación)? Estuvieron meses diciendo que protegían la vida y ahora quieren eliminar la del más indefenso”, protestó el legislador Raúl Albarracín (PJS).

Walter Berarducci, su par en el mismo bloque parlamentario, marcó presencia con un globo que llevaba su nombre y la consigna “Salvemos las dos vidas”. “Este es un proyecto que piensa en las elecciones de 2021; quieren usufructuar con la muerte y dividen más a la sociedad”, dijo el alfarista. Otros políticos que marcharon fueron la senadora Silvia Elías de Pérez (UCR), la diputada Lidia Ascárate (UCR) y la legisladora Nadima Pecci (FR).

Ricardo von Büren, decano de la Facultad de Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales de la Unsta, opinó que “ciudadanos de toda la Argentina, sin distinciones de credo y orientación política, deben manifestarse a favor del derecho a la vida”. “Es una cuestión humana sustentada en la naturaleza y la biología. No es necesario recurrir a argumentos de fe”, expresó el docente a este diario.

Además, dijo que la legislación establece que al aborto es un delito. “El fallo FAL es inconstitucional. Bajo esa normativa se realizaron este año 5.000 abortos; el número de supuestos procedimientos clandestinos es inventado. Es sabido que los organismos internacionales, como el FMI, exigen a los países esta agenda para llegar a acuerdos”, denunció el profesional universitario. Ana Fourmantin, otra de las asistentes, coincidió en la idea de una “imposición internacional” para legalizar el aborto.

El monseñor Carlos Sánchez, arzobispo de Tucumán, fue una de las figuras más saludadas por los manifestantes. “Nadie tiene derecho a conculcar la vida de nadie: ni en el seno materno ni la de un violador o asesino con un linchamiento. No hay argentinos que sobran”, consideró. Y dejó un mensaje para los políticos: “escuchen al pueblo y sean conscientes de lo que significa la vida”.

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