13 Diciembre 2019
La mañana fue convulsionada en la sede de la Municipalidad de San Miguel de Tucumán: más de 1.500 manifestantes de la economía popular marcharon ayer para solicitar una audiencia en el municipio. Un grupo de funcionarios municipales cerró las puertas para evitar el paso y hubo incidentes: una de las hojas de las puertas vidriadas estalló en el forcejeo y una cuadrilla de la Policía acudió para separar a los dos grupos. Un manifestante fue trasladado a un hospital por algunos cortes leves.
“A causa del forcejeo estalló el vidrio de la puerta. Nosotros no somos violentos, nos comprometemos a pagar la reparación porque lo que queremos es diálogo con la Intendencia para participar de programas de empleo”, explicó Iván Novillo, uno de los referentes de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP). Los funcionarios que forman parte del gabinete del intendente, Germán Alfaro, evitaron dar declaraciones sobre los reclamos de los manifestantes y por los daños en la sede del municipio.
Novillo contó que la manifestación se organizó para solicitar nuevamente una audiencia con las autoridades. “Presentamos 13 notas para pedir una audiencia en los últimos años. Somos trabajadores de la economía popular: vendedores ambulantes de alimentos y mercadería, cuida-coches, artesanos, pequeños emprendedores, albañiles... Lo que solicitamos es una audiencia para que los diferentes sectores puedan articular con el municipio y así participar de programas de trabajo. Simplemente queremos reunirnos, empezar a ver el modo de trabajar junto al Municipio y poder tener para comer”, profundizó Novillo.
El también integrante del Movimiento Evita advirtió: “solicitamos nuevamente que nos concedan una audiencia, pero no hubo respuesta, así que la semana que viene volveremos a movilizarnos”.
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