Secuestraron vehículos y chatarra y se llevaron una maldición gitana

Secuestraron vehículos y chatarra y se llevaron una maldición gitana

Tránsito retiró vehículos que ocupaban la vereda y parte de la calle en la zona de la autopista, camino al Aeropuerto.

Los agentes de Tránsito mientras cargaban una camioneta que ocupaba un espacio verde en Alfredo Guzmán y Gobernador del Campo. Las gitanas pusieron el cuerpo para resistir el secuestro. Los agentes de Tránsito mientras cargaban una camioneta que ocupaba un espacio verde en Alfredo Guzmán y Gobernador del Campo. Las gitanas pusieron el cuerpo para resistir el secuestro. Analía Jaramillo / LA GACETA
07 Noviembre 2019

Cayeron como un grupo comando, de manera sopresiva. Una decena de agentes de tránsito motorizados, dos policías, tres grúas y un autoelevador (Sampi). En cuestión de minutos, un Fiat Uno ya estaba arriba de la grúa. Abajo, otra decena de gitanas insultaban en dos idiomas a los municipales. Nadie ahí me imaginaba que, un rato después, una gitana mayor dispensaría una maldición contra los agentes.

Secuestraron vehículos y chatarra y se llevaron una maldición gitana Analía Jaramillo / LA GACETA

La Dirección de Tránsito de la Municipalidad realizó un operativo sorpresa en las intersecciones de avenida Gobernador del Campo al 1.200, donde al menos tres familias gitanas viven en varias casas y galpones y acumulan vehículos de todo porte, escombros y chatarra en la vereda y parte de la calle.

"Esto no es de ahora, es de todas las semanas. Venimos siempre, les pedimos que retiren los vehículos y prometen que lo harán, pero no lo hacen", explicaba uno de los agentes de Tránsito mientras trataba de contener a las mujeres que habían salido a defender los bienes que usan para la compraventa.

Los hombres de la familia, desde niños hasta ancianos, se apuraban en mover otros vehículos hacia el interior de un galpón para evitar que terminaran en el corralón.

Los agentes de Tránsito mientras cargaban una camioneta que ocupaba un espacio verde en Alfredo Guzmán y Gobernador del Campo. Las gitanas pusieron el cuerpo para resistir el secuestro. Los agentes de Tránsito mientras cargaban una camioneta que ocupaba un espacio verde en Alfredo Guzmán y Gobernador del Campo. Las gitanas pusieron el cuerpo para resistir el secuestro. Analía Jaramillo / LA GACETA

El operativo comenzó sobre la calle Alfredo Guzmán, colectora de la autopista de Circunvalación, y continuó en el pasaje Rolando Valladares, a la vuelta del primer lugar. De ahí también se retiraron vehículos que ocupaban la acera. Los municipales dejaron los secuestros en el corralón y volvieron a retirar más trastos.

Apresurados en meter algunos vehículos dentro del galpón para evitar el secuestro. Apresurados en meter algunos vehículos dentro del galpón para evitar el secuestro. Analía Jaramillo / LA GACETA

"Les dimos un plazo hasta el sábado para que saquen toda esa chatarra, limpien los escombros y despejen la vía pública. Ellos tienen que entender que más allá de sus costumbres, estas son las normas, y la vereda y la calle no son de su propiedad. Si no lo hacen hasta el sábado, vamos a ir con una topadora y vamos a despejar la calle y la vereda", aseguró Enrique Romero, subdirector de Tránsito y Transporte, quien estuvo al mando del procedimiento.

"Hay un Dios y los va a castigar. A todos ustedes. Los maldigo hasta el día que me muera", gritó una de las gitanas en un ataque de ira mientras los municipales se llevaban los vehículos. También se dio vuelta y se levantó la pollera, a modo de insulto. Los de Tránsito se apresuraron en abandonar el lugar, pero a los minutos volvieron a retirar más vehículos.

La Municipalidad les dio plazo hasta el sábado para remover la chatarra y los escombros del pasaje Valladares. La Municipalidad les dio plazo hasta el sábado para remover la chatarra y los escombros del pasaje Valladares. Analía Jaramillo / LA GACETA

"Se lo hemos dicho de todas las maneras posibles. Se comprometen y después vuelven a hacer lo mismo. Los gitanos varones las mandan al frente a las mujeres y a los chicos, que en muchos casos nos tiran piedras durante los procedimientos", aseguró Romero.

"Como hacía Hitler"

Dos gitanas (entre ellas la que maldecía) accedieron a hablar con LA GACETA, pero no quisieron brindar sus nombres. Para ellas, los procedimientos de Tránsito y de la Policía son atropellos y aseguran que siempre los maltratan, por el sólo hecho de ser gitanos.

"Esto es racismo y discriminación, es lo mismo que hacía Hitler con los judíos. No sé qué piensan estos 'ropa prestada'", dijo una de ellas, en referencia a los uniformados. "Vienen todas las semanas sin previo aviso y se llevan nuestras cosas. Entendemos que ocupamos la vía pública, pero si nos avisan sacamos las cosas", agregó.

En el Rolando Valladares, parte de la calle y la vereda son intransitables por los vehículos y la chatarra. En el Rolando Valladares, parte de la calle y la vereda son intransitables por los vehículos y la chatarra. Analía Jaramillo / LA GACETA

Las mujeres contaron que hace un tiempo la Municipalidad les retiró ropa que tenían colgada en un espacio verde frente a uno de los galpones donde viven, sobre la calle Alfredo Guzmán. Romero confirmó que lo hicieron, porque ocupaba la vía pública. "Como cualquier persona, a la ropa la tienen que colgar en su casa, nadie extiende su ropa en una plaza", dijo el funcionario. Pero ellas aseguran que los procedimientos siempre son violentos y que en esa ocasión le tiraron la ropa al canal que hay en ese sector.

"Nosotros no sabíamos que no se podía colgar ropa ahí. No tenemos espacio en la casa. Somos tres familias, entre 30 y 40 personas, con muchos chicos. Nadie nos escucha ni nos da una mano a nosotros, pero cuando hacen un allanamiento como el del otro día, rápidamente salen a decir que era en un campamento gitano", dijo la mujer, en relación a los operativos policiales que esta semana desbarataron una banda que se dedicaba a los fraudes con vehículos.

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