HBO: “Barry”, joya del humor negro

HBO: “Barry”, joya del humor negro

Personajes disparatados en la tira creada por Bill Hader, el protagonista

GESTUALIDAD. Hader interpreta a un personaje cómico y siniestro a la vez.  GESTUALIDAD. Hader interpreta a un personaje cómico y siniestro a la vez.

Promediando su segunda temporada por HBO, la serie de humor negro “Barry” se consolida como una de las mejores de los últimos tiempos, gracias a lo ingenioso de su trama y -por qué no- a la brevedad de sus capítulos: 30 minutos.

Los ocho episodios de la primera temporada se iniciaban con el curioso planteo de un asesino a sueldo que descubre su vocación por el teatro cuando participa accidentalmente de un taller de actuación.

A partir de allí, lo que parecía increíble se vuelve verosímil y va creciendo en comicidad, por un lado, y en violencia, por otro. Mientras el personaje lucha por dejar atrás su pasado, los acontecimientos se lo impiden y ambos mundos se cruzan peligrosamente.

La primera temporada tuvo cinco nominaciones a los Emmy 2018 y ganó dos: el de mejor actor de serie cómica, para Bill Hader, protagonista y creador de la tira, y el de mejor actor de reparto para el veterano Henry Winkler, por su papel del profesor de actuación.

Si bien el final de la primera temporada fue perfecto, la segunda no ha bajado en calidad. El primer episodio de la nueva entrega profundiza en la idea de la imposibilidad de redención, mientras explora algunos momentos traumáticos del pasado del personaje.

El talento de Hader como guionista se destaca sobre todo en los capítulos que escribió con Alec Berg, un libretista que trabajó en la comedia “Seinfeld”.

Entre la galería de personajes disparatados que desfilan por la historia sobresale el del mafioso que interpreta Anthony Carrigan, capaz de hacer lo que sea para mantener una ridícula amistad con su homólogo boliviano.

La idea de “Barry” surgió a partir de la experiencia de Hader durante los ocho años que fue parte del elenco de “Saturday Night Live”, y que para él significó una enorme presión. Allí se lucía con imitaciones y personajes originales, pero confesó que sufrió de ansiedad durante el tiempo que estuvo en el legendario programa de sketches. “Cuando empecé ‘Saturday Night Live’ realmente quería encajar ahí -explicó Hader-. Los primeros años sentís como que te van a despedir en cualquier momento”. Pero el comediante nacido en 1978 se convirtió en uno de los más brillantes integrantes del elenco del programa, del que se retiró por voluntad propia en 2013. Demostró un conocimiento profundo sobre cómo generar situaciones de comedia propias con un talento y trabajo actoral que le permite amoldarse a cualquier personaje.

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