Por Mariana Apud
20 Diciembre 2018
CÓMODO. Lencina en su cuarto, donde tiene cientos de copas y trofeos. FOTOS DE CÉSAR OSVALDO RUIZ
“Nadie puede entender la paz que siento aquí”, dice “Rafa”. Su mirada se pierde mientras toma el mate que le ceba su mamá, María Eloísa Amaya, en la galería de la casa familiar, en Raco. Los ojos claros del atleta miran hacia la ruta. Parece distraído, pero lo que su mamá dice, o mejor dicho, pide, difícilmente pase inadvertido. “Yo quiero que la gente lo valore, vean lo grande que es él. La gente a veces, no comprende... En vez de decir: ‘eh que lindo, nos representa’”, lamentó la dama, de 74 años.
No debe ser fácil para María Eloísa cuando le llega algún comentario injusto sobre su hijo que tiene una pieza repleta de reconocimientos. “Es mi búnker”, dice “Rafa”. “La gente que visita a mi mamá, se sorprende por tantos trofeos”, continúa contando, sentado con comodidad en un sillón.
LO MEJOR. La mamá de Rafael le ceba mates. “Yo no tomo mucho”, dijo. “Él se hizo ‘matero’ por andariego”, sostuvo.
Además de los diplomas y las distinciones laborales -en la cabecera de su cama hay ocho marcos- hay dos mesas con copas y trofeos, más los que están arriba del ropero. Por la gran cantidad, todos están, obligadamente, a la par. Sólo los que están en la hilera del frente pueden identificarse. Aunque hay una copa dorada que se destaca por su gran tamaño y a la que él mismo le otorga una referencia especial. “La tengo por haber ganado dos veces la media maratón ‘María Pía’”, destacó. Y agregó el mayor motivo de orgullo por el trofeo challenger que tiene. “En el segundo año vino a correr un keniata, Paul Rotich. Primera vez que corría contra un keniata y le gané, así que tiene doble orgullo”, sostuvo “Rafa”. En aquella carrera, Lencina se dio el gusto de vencer a un atleta africano, de los mejores en las carreras de larga distancia. Por si fuera poco, “Rafa”, en esa edición de 2003, también marcó un nuevo récord para el circuito marcado en el parque 9 de Julio.
IDEAL. Lencina tiene todo lo necesario en Raco para entrenar. En la ruta puede estar más de dos horas corriendo y trotando.
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