Juegos Olímpicos de la Juventud: fiesta internacional, con aporte tucumano

“Nunca me imaginé ser atleta olímpico a esta edad”, reconoce Tomás Vanni. “Nunca pensé que después de 10 años llegaría a unos Juegos Olímpicos”, admitió Juan Salsench. Vanni, rugbista de 18 años y Salsench, de 16, karateca, viven con cierta incredulidad la realidad. Caminan por la Villa Olímpica y, como todos los atletas en los primeros días, se maravillan por los detalles.

La emoción se mezcla con la concentración. Distraerse no es opción, pero es inevitable. Es que para los dos tucumanos que desde hoy estarán entre los miles que protagonizarán los Juegos Olímpicos de la Juventud en su tercera versión, un plan con el sello de los cinco anillos no estaba en el horizonte cuando empezaron a practicar sus respectivos deportes.

Repasemos... Vanni debutará el próximo sábado en rugby, modalidad seven, desde las 14.05 y ante Samoa. Cuando el jugador de “Uni” nació en mayo de 2000, el deporte de la ovalada no estaba siquiera en los Juegos mayores. Recién en 2009 el Comité Olímpico Internacional (COI) autorizó su regreso. Apenas siete años después de la llegada del “Pumita” al mundo se oficializaba la creación de los Juegos Olímpicos de la Juventud. “No termino de caer en lo que estoy viviendo”, afirmó el rugbista, que puede jugar de centro y de medio scrum. “La verdad que sí, me sorprendió la convocatoria. Venimos entrenando desde hace dos años. Vamos a tratar de divertirnos y a mostrar lo que los entrenadores nos vienen enseñando”, destacó Vanni, que aún no jugó en la Primera de su club.

“No tengo dudas de que estamos en condiciones de pelear algo importante”, es la percepción del entrenador de Vanni, Lucas Borges. El generalismo del adjetivo que empleó el ex Puma, se puede reducir a que eso trascendental es el podio. Los Pumitas no pueden aspirar a menos. Tendrán el apoyo del público, pero además el antecedente de que Argentina, en los Juegos de 2014 en Nanjing, ganó la medalla de plata.

Como Vanni, Salsench tiene un pasado similar. Cuando empezó a hacer karate a los seis años, el deporte no estaba en el programa olímpico mayor. Tampoco se habían concebido a los Juegos Olímpicos de la Juventud. El arte marcial japonesa, después de varias postulaciones, logró sumarse a la máxima cita del mundo del deporte. Salsench será uno de los privilegiados porque cuando compita el 18 de octubre formará parte de la primera página olímpica del karate. “Voy a buscar la medalla de oro, el primer puesto”, anticipó Salsench, que desde principios de año se trasladó a Buenos Aires. El desarraigo fue para lograr un óptimo rendimiento junto a los entrenadores Franco Icasati y Ricardo López Herrera. En un camino ideal para conquistar el oro que tanto anhela, Salsench debería ganar cinco luchas en la categoría Kumite (Combate) hasta 68 kilos. Tanto Vanni como él tienen el cuello listo para colgarse medallas.