El mercado mira la evolución de la deuda pública

El mercado mira la evolución de la deuda pública

06 Agosto 2018

Los mercados suelen monitorear el crecimiento de la deuda pública en relación al PBI. Con ese ejercicio, se muestra la dinámica de la deuda en el tiempo y puede ser interpretado, en cierta forma, como un indicador de sostenibilidad de ese endeudamiento de un país, indica Invecq Consultora Económica. Si este ratio crece constantemente significa que la deuda que se contrae anualmente supera la expansión de la economía. Eso sería negativo, ya que aumentarían las probabilidades de ocurrencia de una crisis de deuda como consecuencia del peso de los compromisos asumidos por esa economía.

En los últimos meses, la deuda pública argentina ha tenido un salto en relación al PBI respecto de lo que eran las expectativas oficiales. Este fenómeno ocurrió como consecuencia de que, al subir el tipo de cambio, el PBI (es decir, la riqueza anualmente generada por el país) expresado en dólares cae. Este es el efecto directo y matemático de la devaluación sobre este ratio, puntualiza Invecq. Pero, además, la repentina suba del tipo de cambio tiene efectos reales sobre la economía que, en el corto plazo, significan una menor tasa de expansión, por lo que el PBI en dólares se achica respecto de 2017 por una doble vía.

Según la consultora, este año el país cerrará con una deuda pública bruta (es decir, considerando la deuda que el Estado tiene consigo mismo) en torno del 68% del PBI, 11 puntos porcentuales más que las estimaciones bases que manejaba el Ministerio de Hacienda a comienzos de año. Esos puntos adicionales son consecuencia de la depreciación del peso.

Este ratio implicaría una deuda pública bruta de casi U$S 368.000 millones, lo que representaría un aumento en el stock del pasivo de casi el 10% en relación a 2017. Mientras crece aquel stock, el incremento en la participación sobre el PBI sería de 15 puntos porcentuales, lo que podría ser leído como una señal preocupante. “Sin embargo, no es esperable que esta dinámica se sostenga en los próximos años, al menos si el equipo económico logra con éxito llevar a cabo el programa acordado con el FMI”, acota la consultora.

Según este análisis, si el Gobierno nacional mantiene la disciplina fiscal y no ocurren “eventos inesperados”, no son probables nuevos saltos disruptivos en la dinámica del tipo de cambio, sino más bien un movimiento continuo de la moneda al ritmo de una inflación que converge hacia tasas más bajas. Por lo tanto, el ratio de deuda/PBI no volvería a incrementarse.

Ateniéndose fielmente al plan económico acordado con el FMI, la deuda pública alcanzaría un ratio máximo del 71% en 2020 donde lograría estabilizarse e incluso comenzar a bajar suavemente, estima Invecq.

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios