26 Marzo 2018
En la zona serrana de Tafí del Valle, a uno o dos kilómetros del centro de la villa. Los pobladores no tienen la misma disponibilidad de agua potable que los demás habitantes. Ante esta situación y en busca de una solución usan un mecanismo de cosecha de agua.
“Las canaletas de los techos están dirigidas a un tanque de agua posicionado sobre el suelo. Toda el agua de lluvia es recolectada para usar en los sanitarios, para lavar los pisos o los platos, para dar de beber a los animales, etcétera. El agua mineral sólo se compra para beber”, comentó Miguel Díaz de la Secretaría de Medioambiente. Añadió que para evitar la cría de mosquitos los tanques se recubren con tapas oscuras, porque también -afirmó- debe resguardarse el líquido del sol. “La luz solar es un ambiente óptimo para la aparición de microorganismos fotoautótrofos (que realizan fotosíntesis) y para el crecimiento de plantas acuáticas que contaminan el agua”, sintetizó.
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