19 Septiembre 2017
Cada cambio de celular, de tablet, o de computadora impacta en el ecosistema del planeta. Un informe de ONU Medio Ambiente destaca que la industria tecnológica genera hasta 41 millones de toneladas de residuos electrónicos cada año en el mundo, cifra que podría llegar a 50 millones en 2017.
Este incremento se debe al creciente número de consumidores y a la disminución de la vida útil de los dispositivos por una demanda de actualización periódica.
El vertido ilegal de desechos es el inicio de algunos problemas de salud en los países en desarrollo, describe la ONU. Métodos inadecuados como la quema al aire libre son a menudo utilizados por el sector informal para recuperar materiales valiosos, con graves efectos para los humanos y el medio ambiente. Entre el 60 y el 90% de los desechos electrónicos se comercializan o descargan ilegalmente, a menudo con la participación de bandas criminales, detalló la agencia Télam.
"La clave para resolver muchos de estos problemas y asegurar que no nos quedemos sin metales en las próximas décadas es un reciclaje mejor y más formalizado", subraya.
Aunque el panorama parece desolador, están surgiendo soluciones para combatir el manejo ilegal e insostenible de los desechos electrónicos. Recuperar metales valiosos y otros recursos contenidos dentro de los productos electrónicos puede reducir la cantidad de residuos electrónicos producidos, disminuir la presión sobre el medio ambiente, crear empleos y generar ingresos.
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