Buscan pruebas en la casa del odontólogo acusado de abuso

Buscan pruebas en la casa del odontólogo acusado de abuso

El acusado declaró ayer durante más de cinco horas ante el fiscal. Le dio la orden a su abogado de no hacer declaraciones. La Policía secuestró prendas de ropa y las filmaciones de las cámaras de seguridad.

EL ACUSADO. El odontólogo continúa detenido en la ex Brigada.  EL ACUSADO. El odontólogo continúa detenido en la ex Brigada.
08 Septiembre 2017

La Justicia continúa investigando el caso del supuesto abuso que habría sufrido una adolescente, y por el que se encuentra detenido un odontólogo. El fiscal Claudio Bonari ordenó a la Policía realizar una serie de medidas para tratar de establecer si el ataque sexual se habría producido en la vivienda del sospechoso.

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El martes, la familia de una adolescente de 17 años, denunció en la Oficina de Violencia Doméstica de la Corte Suprema de Justicia que el padre de un compañero había abusado de ella. A través de las redes sociales identificaron al autor como Sebastián Juliano. El caso fue derivado al fiscal que consiguió que un juez ordenara su detención cuando se presentó en Tribunales.

Bonari anunció que no realizará declaraciones sobre este caso. Sin embargo, trascendió que el sospechoso viajó como “padre cuidador” con la delegación del curso de su hijo en la gira de egresados a Bariloche el mes pasado. De acuerdo a la versión, el detenido se habría acercado a la menor durante la excursión y luego habrían iniciado una relación cuando regresaron, versión que fue negada por la familia de la víctima.

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Juliano se presentó finalmente ayer ante el fiscal. Declaró durante más de cinco horas y habría negado la acusación en su contra. “No estoy autorizado a realizar declaraciones por pedido de mi defendido”, indicó Javier Arce, su defensor. Con todo, trascendió por otras fuentes que el sospechoso habría asegurado que mantuvo relaciones con la menor, que habrían sido consentidas y que tendría pruebas para demostrar sus dichos.

De acuerdo a algunas versiones, los investigadores estarían analizando otra hipótesis. Allegados a la víctima dijeron que el acusado le podría haber suministrado algún tipo de sustancia para poder someterla. Esa versión se podría confirmar o descartar cuando lleguen los resultados de los estudios a los que habría sido sometida luego de denunciar su caso. También es fundamental su declaración, ya que allí confirmaría o desmentiría la versión de Juliano. Esto no se concretaría por ahora, puesto que la adolescente no estaría en condiciones de ser interrogada.

La menor continúa recuperándose en un sanatorio privado. Habría sufrido al menos un desgarro vaginal. Hay versiones contradictorias: algunas fuentes confirmaron que presenta heridas y otras aseguran que no. Sí es cierto que los familiares hicieron una campaña para conseguir dadores de sangre. También se desmintió que la adolescente haya intentado interrumpir un embarazo o que tuviera un problema de salud por un quiste.

Medidas

Por el momento, no trascendió el lugar donde supuestamente se concretó el encuentro. Algunas versiones indican que fue en un hotel alojamiento, otras en el domicilio del acusado. Por ese motivo, el miércoles por la noche, personal de la división Seguridad Personal, por orden del fiscal, allanó la vivienda que Juliano tiene en el country Veraterra, en Yerba Buena. En la vivienda, según confirmaron fuentes policiales, se encontraban la hija y el personal doméstico que trabaja con el detenido.

Un equipo dirigido por el subcomisario Cristian Peralta y el comisario Ricardo Villagra, según trascendió, incautó un pantalón, una media blanca y un acolchado blanco que supuestamente estaban manchados con sangre.

También, de acuerdo a la información brindada por fuentes judiciales, realizaron un estudio en dos camionetas y en un auto. En uno de los vehículos de mayor porte levantaron muestras de manchas pardos rojizas y un cabello. A partir de esos hallazgos, sospechan que la menor fue trasladada en esa camioneta hasta su domicilio, cuando ya se encontraba lesionada.

Ayer al mediodía, los policías volvieron al country. En esta última oportunidad secuestraron las filmaciones de las cámaras de seguridad para saber si el acusado ingresó a ese lugar con la menor.

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