Una madre y una hija atravesadas por la gloria de Hollywood

Apenas un día después de que la hija falleciera de un paro cardíaco, murió la madre, a los 84 años. “Está con Carrie”, comunicó a la prensa Todd Fisher, el hijo de Debbie Reynolds y hermano de Carrie Fisher, el miércoles por la noche.

Reynolds murió en el hospital Cedars-Sinaí de Los Ángeles después de sufrir un derrame cerebral. Se encontraba en la casa de su hijo, en Beverly Hills, planificando el funeral de su hija, cuando se descompuso y hubo que llamar a una ambulancia, según el sitio especializado TMZ.

Fisher (la memorable Princesa Leia de “La guerra de las galaxias”) había fallecido el martes, a los 60 años, después de haber sufrido un infarto la semana pasada, cuando viajaba en un avión de Londres a Los Ángeles.

Entre actrices

Madre e hija tocaron la fama mundial muy jóvenes: ambas a los 19 años. Reynolds, cuando interpretó a Kathy, en “Cantando bajo la lluvia”, el rol que la hizo entrar en el mapa de la era dorada de Hollywood, informó ENews. Fisher, cuando interpretó por primera vez a Leia en el inicio de la famosa saga de ciencia ficción.

La relación entre ambas no siempre fue color de rosa. “Me resultaba extremadamente difícil compartir a mi madre con los fans que la idolatraban y la trataban como si formara parte de sus familias”, confesó Fisher durante una entrevista el año pasado.

La carrera de Reynolds le restaba tiempo para sus dos hijos, y el padre, Eddie Fisher, estaba ausente. La vida familiar giraba en torno de la famosa mamá, hasta el punto de que los chicos celebraron algunos de sus cumpleaños en los estudios de la Metro-Goldwyn-Mayer. Con semejante panorama no sorprendió que Carrie irrumpiera en la escena nocturna de Los Ángeles fumando marihuana y consumiendo cocaína, heroína o LSD.

Se distancian

Fisher superó sus adicciones en una clínica de desintoxicación, pero en el camino le fue diagnosticado trastorno bipolar. Durante casi 10 años, madre e hija apenas tuvieron contacto. “No quería estar cerca de ella. No quería ser la hija de Debbie Reynolds”, contó.

Al fracaso de su matrimonio con el cantante pop Fisher (la abandonó para casarse con Elizabeth Taylor) Reynolds sumó un frágil segundo enlace con Harry Karl y algunos problemas financieros. “Su vida en aquella época era una locura y yo estaba en medio”, recordaba su hija.

Reynolds, en cambio, le dijo a la revista “People” que fue una buena madre, pero siempre formó parte del showbusiness. “Estaba sobre el escenario en lugar de quedarme en casa y preparar galletitas”, confesó.

Pasados muchos años, el tiempo sanó las heridas y madre e hija se reencontraron. A tal punto que en los últimos tiempos vivían una al lado de la otra, y se veían casi a diario.

Libros y películas

En 1987 Mike Nichols filmó “Recuerdos de Hollywood”, con Meryl Streep y Shirley McLaine, basado en el libro de Fisher “Postcards from the Edge” (Postales desde el filo). Se trata de una autobiografía ligeramente maquillada de su lucha contra las drogas y de su difícil relación con su madre, señala The Hollywood Reporter.

“Si algo me enseñó mi madre fue a ‘sobre-progresar’ (contracción de sobrevivir y progresar). Es mi palabra para ello. Ella atravesaría por cosas increíblemente difíciles y su mensaje era claro: es posible hacer lo imposible, pero no es divertido”, dijo a The New York Times.

Tributo con fecha

Ambas volverán a aparecer juntas en una producción de HBO en 2017. El 14 de mayo será el estreno de “Bright lights: starring Carrie Fisher y Debbie Reynolds” (“Luces brillantes: protagonizada por Debbie Reynolds y Carrie Fisher”) documental dirigido por Fisher Stevens y Alexis Bloom que examina esa relación difícil pero amorosa en toda su complejidad. La premier del filme de 95 minutos tuvo lugar este año, en el Festival de Cine de Cannes, antes de que se convirtiera en tributo.