Martín Terán: “da gusto ver a estos Pumas”

Lo primero que se le viene a la cabeza a un tucumano cuando le mencionan el historial entre Los Pumas y Australia es el inolvidable doblete de Martín Terán a los Wallabies, en el Mundial 91. Por estos días se pudo ver inclusive al ex wing surgido en Tucumán Rugby repasando ambas conquistas en la sección “yo hice un try” de ESPN.

A 24 años del partido en el que logró el récord de ser el Puma más joven en marcar un try en un Mundial, con 22 años y tres meses (fue superado en esta edición por Guido Petti, que les anotó uno a los All Blacks con 20 años), el tucumano se confiesa sorprendido por el nivel que viene mostrando el seleccionado en Inglaterra.

“Hace un año, pensaba que Los Pumas tenían demasiados jugadores jóvenes, pero hoy juegan que da gusto verlos. Nos sorprendió a más de uno. Física y técnicamente se han acercado mucho a las potencias. Fijate que antes hacíamos buenos partidos, pero un momento dado ya nos quebraban. Ahora es diferente. Por eso, no me extrañaría que Los Pumas ganaran. Y si no es así, creo que si se mantiene la base y se sigue trabajando de la misma manera, Argentina tiene que ser campeón del mundo dentro de cuatro años”, arriesga.

Máxima concentración

En la ruleta previa de candidatos al título, Martín no dudó al momento de apostar su ficha a Australia. “Es que para mí se trata del equipo que técnicamente mejor juega al rugby en el mundo. Contra ellos hay que jugar muy concentrados, porque si les das espacios te quiebran y cuando te das cuenta te están goleando. Por eso, me parece que será fundamental el factor concentración”, analiza.

Por otra parte, Terán advierte que un arranque sólido será un bálsamo para la confianza. “No tengo dudas de que esos primeros 20 minutos van a ser cruciales. Si los jugadores logran repetir ese inicio de alto ritmo con el que hicieron diferencia frente a Irlanda, las chances de ganar serán mucho mejores. Después de esos primeros 20 minutos, los equipos se acomodan, el juego se empareja y el partido se pone para cualquiera. Pero le tengo fe al equipo”, asegura.

Al margen de la filosofía ofensiva que profesan los Wallabies, Martín cree que Los Pumas no cambiarán de libreto. “Yo tal vez no arriesgaría tanto, pero vienen haciéndolo tan bien, que seguramente van a sostener esa idea. Además, ya se sacaron la presión de quedar entre los mejores. Todos están contentos con lo que lograron, así que creo que jugarán más sueltos. Puede salir un partido lindo y con muchos puntos”, vaticinó.

Punto de vista

No llegaron por casualidad

Por Manuel Cardozo - La Gaceta

Que Los Pumas estén en las semifinales del Mundial no fue fruto de la casualidad ni un destello esporádico. Hubo muchas decisiones en el camino, orientadas en una dirección que no muchos entendieron desde el primer momento. Una de ellas, de importancia primordial, fue la de golpearles la puerta a las potencias del Pacífico para competir y aprender de ellas. El sendero de derrotas que vino a continuación, bastante lógico, hizo aún más difícil la tarea de convencer a los escépticos de que el camino era el correcto. Pero para ver los frutos, además de trabajar, hay que esperar.

Pasó mucha agua bajo el puente en estos cuatro años. Muchas fueron malas noticias, pero la confianza en el proyecto se mantuvo inalterable. Por eso hoy podemos hablar del seleccionado argentino como uno de los mejores del mundo y con mayor proyección. Sus jugadores, antes ponderados por esa entrega inclaudicable, ese corazón que los identificaba como Pumas, hoy son reconocidos también por las bondades de su juego. Por su ambición, por su audacia y por la rapidez con la que han impregnado su rugby del estilo sureño, sobrepasando a las potencias del Hemisferio Norte. Ni ellos mismos podían creer en ese comienzo contra Irlanda la claridad con la que estaban avasallando al campeón del Europa. 

Lo mejor de todo es que este equipo aún no alcanzó su techo por la juventud de muchos de sus jugadores. Algunos apenas pasan la mayoría de edad pero ya juegan como veteranos gracias al roce de primer nivel que les da el Championship. A partir del año que viene, cuando Argentina ingrese con su franquicia al Súper Rugby, el crecimiento será mayor. De todos modos, en el Mundial el equipo mostró flaquezas que pueden y deben ser corregidas. 

No se observan aires de grandeza en el plantel. La humildad viene desde el cuerpo técnico. Por eso han contagiado al público. No es descabellado pensar que este equipo sea finalista y hasta campeón. Parece un sueño, pero no lo es. El trabajo comenzó a dar los frutos y nada es casualidad.