Según Jaldo, el acople debe ser revisado

Tras los comicios del domingo 23 del mes pasado, el sistema electoral quedó bajo la mirada inquisidora de la sociedad, pero también de un sector de la dirigencia política. Oficialistas y opositores -en la mayoría de los casos, en voz casi susurrante- empezaron a fruncirle el ceño al acople, porque la proliferación de candidatos que permite esa herramienta resultó contraproducente para sus intereses.

El ministro del Interior, Osvaldo Jaldo, admitió que el sistema puede haber agotado su tiempo de vida; pero subrayó que cualquier eventual debate sobre eventuales reformas deberá darse dentro de un marco institucional. En concreto, se refería al recinto legislativo que, si el escrutinio definitivo ratifica los guarismos provisorios, le corresponderá presidir. Precisamente, antes de opinar sobre el acople Jaldo se refirió a los cuestionamientos judiciales que pesan sobre las elecciones, en general, y sobre el conteo final, en particular.

“Como hombre de la democracia mantengo la postura que caracterizó al Frente para la Victoria y a este Gobierno: soy muy respetuoso de las instituciones; en este caso, de la Junta Electoral Provincial (JEP) y de la Justicia”, señaló. Precisó, sin embargo, que no tiene dudas acerca del triunfo del oficialismo: “la fórmula que integro con Juan Manzur superó por más de 100.000 votos a la del Acuerdo para el Bicentenario; y por eso esperamos con tranquilidad que termine el escrutinio definitivo”.

Jaldo adelantó que, en caso de que finalmente se consagre vicegobernador, buscará el consenso puertas adentro de la Legislatura. “Llegó la hora de que los políticos dialoguemos. Si tras el escrutinio final se ratifica que soy vicegobernador promoveré el diálogo permanente entre los legisladores de las distintas fuerzas que integren la Cámara. Porque el diálogo debe darse dentro de un marco institucional; es decir, con los genuinos representantes del pueblo”, indicó.

Jaldo no se mostró particularmente duro con el sistema de acoples; incluso, se permitió una pequeña chicana para la oposición. “Este sistema electoral fue incluido en la Constitución, en la última reforma (2006); es decir, tiene casi 10 años, y vino siendo utilizado, tanto por oficialistas como por opositores durante los últimos comicios, para acceder a distintos cargos”, dijo. Admitió, sin embargo, que su eventual análisis debe estar incluido en la agenda a discutir a futuro. “No hay dudas de que surgieron fuertes cuestionamientos. Vamos a propiciar el debate con las fuerzas opositoras, para analizar sus propuestas y las nuestras. Entendemos que el sistema viene cumpliendo su ciclo; estamos siempre dispuestos si hay que hacer modificaciones”, afirmó.

La Facultad de Derecho lanzó el proyecto Juan Bautista Alberdi, con el fin de revisar el actual sistema y de evaluar posibles reformas. Jaldo adelantó que los aportes técnico-jurídicos serán bienvenidos; pero destacó que todo sistema electoral tiene un importante componente político. “Seguro se tendrá en cuenta lo que nos acerque la facultad. Pero al margen de las cuestiones legales y técnicas, están las cuestiones políticas; y ahí deberemos opinar oficialismo y oposición”, señaló.

Pero precisó que no será cualquier oposición: “cualquier reforma sobre temas electorales debe salir por consenso de todos los genuinos representantes de los partidos políticos; en la Legislatura están las voces del pueblo y de los partidos”. Para finalizar, señaló que del mismo modo se deben discutir todos los temas que le interesan a la comunidad.