Por Miguel Eduardo Décima
20 Abril 2015
UNA BUENA. El arquero Juan Carrera se tira bien abajo ante la llegada del delantero rival y se redime de los fallos que tuvo en los dos goles de Américo Tesorieri. foto de Natalia Diaz - diario “El Independiente” de La Rioja
San Martín no mereció sufrir tanto para regresar al “Jardín de la República” con los tres puntos que fue a buscar a La Rioja, en la casa de Américo Tesorieri. Es que si los “santos” no pudieron establecer la contundente diferencia que mostraron en el campo sobre un modestísimo rival, fue sólo porque en el fútbol la mala tarde de un sólo jugador puede cambiar los planes de todos. En este caso el que no la pasó nada bien fue Juan Carrera, el arquero que fue protagonista clave en el 3-2 del equipo.
Pero vamos por parte. El resultado final no refleja para nada lo que se vio en la cancha ni lo que realmente mereció San Martín. Es que fue notoria la diferencia de jerarquía entre uno y otro equipo.
El primero en plasmar esa realidad fue Braian Uribe, que puso el 1-0 con un bombazo espectacular que los hinchas que se dieron el lujo de viajar hasta La Rioja aplaudieron hasta quemarse las manos.
Esa mínima diferencia hizo pensar que el triunfo de San Martín, el mismo que se imaginó en la previa, estaba asegurado. Pero... Inmediatamente después del golazo del “9” llegaron los errores de Carrera.
Fueron dos descuidos seguidos del arquero los que le permitieron a los riojanos establecer una diferencia 2-1 que quedaba como demasiado premio para lo que realmente se había visto en los primeros 45 minutos. Claudio Núñez y Lucas Ceballos fueron los que no le perdonaron sus despistes.
Sin embargo, el “santo” pagó con la misma moneda y le dio vuelta el partido al anfitrión. En el complemento, Carrera ya no tuvo ninguna intervención y eso fue gracias a que San Martín monopolizó la pelota y puso contra las cuerdas a su rival.
Tres minutos tardó Lucas Chacana pone el 2-2, con una definición que llevó su sello: dejó a dos rivales en el camino definió con prestancia ante la salida de Andrés Angelini. A partir de allí, con el buen trabajo de Marcelo Castellano, el “santo” comenzó a edificar el tercero. La jugada nació por derecha, en un desborde de Iván Agudiak que envió el centro al segundo palo donde Castellano esperaba para marcar y desatar la alegría merecida de San Martín, que quedó segundo en zona, a cuatro del líder.
Pero vamos por parte. El resultado final no refleja para nada lo que se vio en la cancha ni lo que realmente mereció San Martín. Es que fue notoria la diferencia de jerarquía entre uno y otro equipo.
El primero en plasmar esa realidad fue Braian Uribe, que puso el 1-0 con un bombazo espectacular que los hinchas que se dieron el lujo de viajar hasta La Rioja aplaudieron hasta quemarse las manos.
Esa mínima diferencia hizo pensar que el triunfo de San Martín, el mismo que se imaginó en la previa, estaba asegurado. Pero... Inmediatamente después del golazo del “9” llegaron los errores de Carrera.
Fueron dos descuidos seguidos del arquero los que le permitieron a los riojanos establecer una diferencia 2-1 que quedaba como demasiado premio para lo que realmente se había visto en los primeros 45 minutos. Claudio Núñez y Lucas Ceballos fueron los que no le perdonaron sus despistes.
Sin embargo, el “santo” pagó con la misma moneda y le dio vuelta el partido al anfitrión. En el complemento, Carrera ya no tuvo ninguna intervención y eso fue gracias a que San Martín monopolizó la pelota y puso contra las cuerdas a su rival.
Tres minutos tardó Lucas Chacana pone el 2-2, con una definición que llevó su sello: dejó a dos rivales en el camino definió con prestancia ante la salida de Andrés Angelini. A partir de allí, con el buen trabajo de Marcelo Castellano, el “santo” comenzó a edificar el tercero. La jugada nació por derecha, en un desborde de Iván Agudiak que envió el centro al segundo palo donde Castellano esperaba para marcar y desatar la alegría merecida de San Martín, que quedó segundo en zona, a cuatro del líder.
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