Textos con peso propio

En lo primero en que pensé cuando anunciaron la muerte de Gustavo Cerati es en que hace ya dos años que nos dejó Spinetta y todavía no lo podemos superar. No es casual asociarlos: la obra de Cerati reconoce ADN de Luis y la voz, en algunos lugares de su canto, deja escuchar inflexiones parecidas. Con la muerte de Gustavo se cierra también la obra de una de esas raras aves que aparecen cada tanto en el arte, cuyas creaciones son a la vez masivas y de un alto nivel de calidad. Fue parte de la mejor tradición del rock local, a cuyas canciones las protagonizan textos con peso propio; poesía contemporánea entregada en un envoltorio pop. Los temas de Soda Stereo forman parte de la banda de sonido de los años 80 y sus letras maduraron muy rápido, desde los divertimentos de los primeros discos a textos y melodías que se fueron sofisticando, y que Cerati después profundizó en un camino todavía más personal en su carrera solista. Con su muerte deja un agujero enorme, pero también queda, para llenarlo, una discografía que integra lo mejor de nuestra música popular contemporánea; canciones inolvidables para hacernos compañía.