Dos pavos que viajan por el tiempo para cambiar la historia

Dos pavos que viajan por el tiempo para cambiar la historia

La película de los productores de Shrek se basa en una tradición norteamericana, bastante lejana de las costumbres argentinas

OBJETIVO: NIÑOS. Reggie y Jake van al pasado para salvar su especie.   OBJETIVO: NIÑOS. Reggie y Jake van al pasado para salvar su especie.
16 Enero 2014
La exigencia de estrenar películas para niños en fechas clave (como pueden ser eventos festivos o vacaciones) se encuentra fuertemente facilitada por el desarrollo de las tecnologías para el cine, incluso en 3D. En su conjunción, se ha creado en la industria de Hollywood un mecanismo de producción que tiene puntos altos y bajos.

“Dos pavos en apuros” (“Free birds”) expone esas oscilaciones, en la búsqueda de una historia convocante para los más chicos y que, al mismo tiempo, pueda ser entretenida para los adultos acompañantes a las salas de proyección.

Ya desde el origen, la propuesta está lejos (emotivamente) del público argentino, ya que se basa en la tradición de América del Norte de comer pavo en el último jueves de noviembre de cada año, en el llamado Día de Acción de Gracias, una cena que reúne hasta a las familias más distantes y en la cual nadie quiere quedarse solo.

El protagonista animado es Reggie, un pavo norteamericano que está a punto de ser sacrificado para la tradicional comida, hasta que es indultado por el Presidente de los Estados Unidos (una costumbre que se repite en todo mandatario, sea demócrata o republicano, como demostración de su piedad). A partir de entonces, el beneficiado tiene una tranquila, calmada y acomodada vida en los jardines presidenciales.

Pero esa calma es trastornada por la llegada de su antítesis Jake, un agitador que lo convence en viajar por el tiempo (a través de una máquina inventada a tal efecto, lugar común del cine si lo hay) para modificar la historia de los primeros colonos en América del Norte (la cena tiene un origen que se remonta a 1621, como festejo por una buena cosecha) y así evitar que la costumbre se instale y salvar generaciones enteras de pavos destinados a los hornos familiares.

Desafíos
Quizás el mayor desafío de “Dos pavos...” sea evitar ser comparada con la brillante “Pollitos en fuga”, más allá de que sus técnicas de realización sean radicalmente diferentes. Otro desafío es atender a un correcto doblaje al español, como será una de las versiones disponibles en la Argentina. En su original estadounidense, las voces de los personajes están a cargo de Owen Wilson, Woody Harrelson y Amy Poehler, entre otros.

En distintos rubros, “Dos pavos...” tiene pergaminos para convocar al cine, y así se demuestra en que su director y guionista, Jimmy Hayward, es el mismo de “Horton y el mundo de los quién”, y de que los productores del filme fueron los de “Shrek”. Luego, grandes y, muy especialmente, chicos darán su veredicto.

Comentarios