Poker de campeones

Poker de campeones

Dino, Carlos, Luis y Manuel Cáceres, la gran familia del Lawn Tennis campeón del Regional "100 años LA GACETA".

HAY DINASTÍA PARA RATO. Los hermanos junto a Luis Cáceres padre y los pequeños Lucas, Matías y Dino. Los primeros son hijos de Luis, el otro, de Dino. LA GACETA / FOTO DE ANTONIO FERRONI HAY DINASTÍA PARA RATO. Los hermanos junto a Luis Cáceres padre y los pequeños Lucas, Matías y Dino. Los primeros son hijos de Luis, el otro, de Dino. LA GACETA / FOTO DE ANTONIO FERRONI
El rugby es el deporte familiar por excelencia. Por eso, ver dos hermanos jugando en el mismo equipo no es nada del otro mundo. Ver cuatro, en cambio, no es tan común. Y que los cuatro sean titulares y ganadores en una final regional es directamente un caso único. Al menos, a nivel nacional y de conocimiento público.

"Lo bueno de jugar con hermanos es que manejás códigos propios, que los demás no entienden. En ese sentido es más fácil", opina Manuel Cáceres, el menor del singular cuarteto de Lawn Tennis. Carlos pone de manifiesto la contracara: "aunque a veces es complicado, por esa pelea propia de hermanos. A lo mejor a otro lo podés mandar a ya sabés dónde, pero con tu hermano te lo tenés que tragar".

Si cuatro ya parecen muchos, se debe saber que pudieron ser cinco: Juan Martín, el quinto hermano, se decantó por el fútbol. Pero si algo los vuelve especiales es el privilegio de haber conseguido juntos la corona del Regional "100 años LA GACETA".

"Personalmente, y pese a semejante partido, estaba muy tranquilo. No sólo durante la final, sino también en la semana previa. Tal vez sea la experiencia, pero incluso cuando íbamos perdiendo por 10 tantos y faltaban 15 minutos, internamente sentía que lo íbamos a ganar", cuenta Dino.

Muy similar fue el asunto para Luis, el mayor. "En esta final no estaba ni la mitad de nervioso que en la de 2008. Pasa que aquélla fue la primera final de Dino, Carlos y mía, además de que hacía 26 años que Lawn Tennis no salía campeón", recuerda.

Esta vez la ansiedad de la primera final fue de Manolo, que la pasó fatal: "fue durísimo. Los días previos casi no dormí de los nervios. ¡No entendía cómo ellos podían estar tan tranquilos!".

El benjamín de los "benjamines" es el único que escapa a la pregunta que ninguno se animó a hacer: ¿el título fue el broche de oro para alguno?

"Hay que negociar con la patronal", afirma Carloncho, con cara de que las tratativas serán arduas. "Ya a nuestra edad tenemos más responsabilidades en la casa. Con el Torneo del Interior vendrán los viajes. Y eso a la familia le cuesta aceptarlo", completa Luis.

Dino se encarga de cerrar la ronda: "acá todo depende de Luis. Como es el mayor, no podemos largar antes que él. No sé si a su edad, pero al menos un año después. Así que, Luis...tirá un añito más, dale".

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios