14 Abril 2012
RESISTENCIA.- La beba rescatada de la morgue del hospital Perrando de Resistencia sufrió un paro cardiorrespiratorio y presentaba ayer un alto riesgo de muerte, informó la jefa del área de neonatología del centro de salud, Diana Myriam Vesco.
En tanto, el jefe de Neonatología del Hospital Italiano, Carlos Fustiñana, viajó a Chaco para una interconsulta con médicos de esa provincia y descartó la posibilidad de trasladar a Buenos Aires a la beba.
Vesco sostuvo que la niña Luz Milagros se encontraba clínicamente desmejorada con respecto al jueves, con alto riesgo de fallecer. "Presentó una descompensación clínica, con hemorragia pulmonar y digestiva alta, lo que requirió un aumento de los parámetros de ventilación mecánico. Realizó un paro cardiorrespiratorio que necesitó maniobras de reanimación avanzada", manifestó la médica del Perrando.
La especialista dijo que la beba, cuyo peso actual es de 780 gramos, padeció convulsiones, y precisó que se encuentra con drogas inotrópicas a altas dosis, y que le suministran antibióticos de alto espectro por el proceso infeccioso que afronta.
La niña nació tras una gestación de seis meses el 3 de abril en Chaco, pero fue declarada muerta por los médicos y rápidamente derivada a un frigorífico de la morgue. Doce horas después sus padres quisieron verla para despedirse y descubrieron que la niña estaba con vida.
"Suele decirse que Dios atiende en Buenos Aires, pero acá hay un buen grupo de neonatólogos y el equipamiento es adecuado. No necesita de otras instancias terapéuticas", dijo por su parte Fustiñana. "El riesgo de un traslado es mayor que los beneficios que se le podrían dar", destacó el médico porteño.
Asimismo, sostuvo que la beba es una paciente que está grave, con un cuadro bien característico de los prematuros que nacen en el límite de la viabilidad. "Son pacientes muy inestables desde el punto de vista cardíaco, respiratorio y digestivo", precisó. (DyN)
En tanto, el jefe de Neonatología del Hospital Italiano, Carlos Fustiñana, viajó a Chaco para una interconsulta con médicos de esa provincia y descartó la posibilidad de trasladar a Buenos Aires a la beba.
Vesco sostuvo que la niña Luz Milagros se encontraba clínicamente desmejorada con respecto al jueves, con alto riesgo de fallecer. "Presentó una descompensación clínica, con hemorragia pulmonar y digestiva alta, lo que requirió un aumento de los parámetros de ventilación mecánico. Realizó un paro cardiorrespiratorio que necesitó maniobras de reanimación avanzada", manifestó la médica del Perrando.
La especialista dijo que la beba, cuyo peso actual es de 780 gramos, padeció convulsiones, y precisó que se encuentra con drogas inotrópicas a altas dosis, y que le suministran antibióticos de alto espectro por el proceso infeccioso que afronta.
La niña nació tras una gestación de seis meses el 3 de abril en Chaco, pero fue declarada muerta por los médicos y rápidamente derivada a un frigorífico de la morgue. Doce horas después sus padres quisieron verla para despedirse y descubrieron que la niña estaba con vida.
"Suele decirse que Dios atiende en Buenos Aires, pero acá hay un buen grupo de neonatólogos y el equipamiento es adecuado. No necesita de otras instancias terapéuticas", dijo por su parte Fustiñana. "El riesgo de un traslado es mayor que los beneficios que se le podrían dar", destacó el médico porteño.
Asimismo, sostuvo que la beba es una paciente que está grave, con un cuadro bien característico de los prematuros que nacen en el límite de la viabilidad. "Son pacientes muy inestables desde el punto de vista cardíaco, respiratorio y digestivo", precisó. (DyN)
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