04 Enero 2012
VIGILIA. En carpas y sillas, los militantes velan por la salud de Cristina. DYN
BUENOS AIRES.- "Avanti, Morocha". La frase, tomada de una canción de rock nacional, se convirtió en la leyenda de casi todas las banderas y carteles que adornan los alrededores del Hospital Universitario Austral, donde permanece internada la presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, a la espera que la intervención por un cáncer en las tiroides, programada para hoy a las 8.
Allí, en la puerta del centro asistencial, situado en la localidad bonaerense de Pilar, decenas de seguidores de la mandataria pasaron la noche para transmitirle ánimos a su líder.
"No hay nada más saludable que el amor entre el pueblo y la Presidenta", afirma uno de los carteles pegado sobre una imagen que muestra al fallecido ex presidente Néstor Kirchner abrazando a la mandataria.
Algunas de las personas que realizan la vigilia están acompañadas por sus familias, y han colocado carpas en un improvisado campamento, sobre las veredas frente al hospital, flanqueado por un estacionamiento que cubre cerca de 200 metros del predio.
Además de los militantes kirchneristas, en el lugar se instaló una nutrida guardia periodística, conformada por medios locales, nacionales e internacionales. En todo ese sector, así como en los alrededores del centro médico, agrupaciones políticas, sociales y sindicales realizaron pegatinas con las leyendas: "fuerza, Cristina", y "avanti, Morocha".
La mandataria, en tanto, le cederá provisoriamente sus funciones al vicepresidente de la Nación, Amado Boudou, quien se hará cargo del PEN desde hoy hasta el 24 de enero. Está previsto que ese día, Cristina Fernández retome sus actividades.
Durante un acto con los gobernadores en la Casa de Gobierno, el 28 de diciembre, la Presidenta dijo: "seguiré trabajando como siempre, con el mayor de los compromisos, y les agradezco todo lo que puedan hacer por la Argentina, nada más que por la Argentina, por ella es por la única que pido". También agradeció las muestras de solidaridad que recibió. En especial, se refirió a otros presidentes latinoamericanos como Hugo Chávez, de Venezuela; Sebastián Piñera, de Chile; Juan Manuel Santos, de Colombia; Fernando Lugo, de Paraguay y Dilma Rouseff, de Brasil. Además, les pidió a los gobernadores que pusieran su mayor esfuerzo mientras durara la licencia. (Télam-Especial)
Allí, en la puerta del centro asistencial, situado en la localidad bonaerense de Pilar, decenas de seguidores de la mandataria pasaron la noche para transmitirle ánimos a su líder.
"No hay nada más saludable que el amor entre el pueblo y la Presidenta", afirma uno de los carteles pegado sobre una imagen que muestra al fallecido ex presidente Néstor Kirchner abrazando a la mandataria.
Algunas de las personas que realizan la vigilia están acompañadas por sus familias, y han colocado carpas en un improvisado campamento, sobre las veredas frente al hospital, flanqueado por un estacionamiento que cubre cerca de 200 metros del predio.
Además de los militantes kirchneristas, en el lugar se instaló una nutrida guardia periodística, conformada por medios locales, nacionales e internacionales. En todo ese sector, así como en los alrededores del centro médico, agrupaciones políticas, sociales y sindicales realizaron pegatinas con las leyendas: "fuerza, Cristina", y "avanti, Morocha".
La mandataria, en tanto, le cederá provisoriamente sus funciones al vicepresidente de la Nación, Amado Boudou, quien se hará cargo del PEN desde hoy hasta el 24 de enero. Está previsto que ese día, Cristina Fernández retome sus actividades.
Durante un acto con los gobernadores en la Casa de Gobierno, el 28 de diciembre, la Presidenta dijo: "seguiré trabajando como siempre, con el mayor de los compromisos, y les agradezco todo lo que puedan hacer por la Argentina, nada más que por la Argentina, por ella es por la única que pido". También agradeció las muestras de solidaridad que recibió. En especial, se refirió a otros presidentes latinoamericanos como Hugo Chávez, de Venezuela; Sebastián Piñera, de Chile; Juan Manuel Santos, de Colombia; Fernando Lugo, de Paraguay y Dilma Rouseff, de Brasil. Además, les pidió a los gobernadores que pusieran su mayor esfuerzo mientras durara la licencia. (Télam-Especial)
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