Consejos
20 Diciembre 2011
No decorés en exceso.- Las luces parpadeantes y los decorados muy grandes pueden causar desorientación. Evitá las velas y otros elementos que atenten contra la seguridad, así como los adornos que puedan ser confundidos por comestibles, como las frutas artificiales.

Que el festejo sea tranquilo.- Procurá que las celebraciones familiares transcurran en paz, en un clima armonioso. La música, el bullicio y los ruidos estruendosos pueden modificar el estado de ánimo de la persona con Alzheimer y exacerbar los síntomas de la enfermedad. Para este tipo de paciente lo mejor son los ambientes tranquilos, sin perturbaciones.

Mantené la rutina diaria.- No realicés grandes cambios si querés evitar desconciertos e irritabilidad. No permitas que los invitados hagan cualquier cosa con el intento de hacerlo feliz a la persona que sufre Alzheimer, porque el resultado será todo lo contrario. Designá un espacio especial donde el paciente se sienta seguro y se pueda retirar a descansar.

Coordiná las visitas.- Minimizá el movimiento de visitas dándoles diferentes días a cada uno de los familiares. Recordá que las personas con Alzheimer se cansan y se fastidian fácilmente. El paciente puede apreciar mejor el encuentro durante la mañana o el almuerzo. Evitá las visitas nocturnas porque pueden alterarle el sueño y generarles agresividad y más confusión.

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