18 Agosto 2010
VIDA SANA. La futura mamá debe comer frutas, verduras y proteínas. NUTRICION.COM
BUENOS AIRES.- La decisión de ser madre trae aparejada nuevas responsabilidades, sentimientos y miedos, por lo que la consulta médica al ginecólogo en el momento de tomar la decisión de ser mamá, ayuda a tranquilizar y resolver inquietudes e incertidumbres.
El ginecólogo es quien explicará los tiempos, ordenará estudios de rutina para conocer el estado de salud general de la mamá y contestará todas las dudas de los futuros padres.
Según indicó David Fusaro, médico ginecólogo, director médico del Instituto Ginecológico de Buenos Aires, "aquellas mujeres que deseen ser mamás deben tener en cuenta que muchas veces deben modificar u ordenar ciertos comportamientos que ayudan a llevar un embarazo saludable".
"Se recomienda que no fumen, tengan una dieta sana, rica en verduras, frutas y proteínas, hagan actividad física y visiten a su obstetra, quien seguirá el embarazo hasta el momento del parto", aseguró Fusaro.
La primera consulta
El especialista puso de relieve que la primera consulta previa a estar embaraza "es clave", ya que el ginecólogo indica el inicio de la toma de ácido fólico.
"Si bien el ácido fólico es una vitamina que se encuentra presente en el organismo de todas las personas en dosis muy bajas, para el momento del embarazo es imprescindible el refuerzo de ácido fólico en comprimidos dado que es la vitamina que colabora en el cierre del tubo neural del bebé. Este cierre ocurre en las primeras semanas de la gestación", detalló.
En ese sentido el ginecólogo remarcó: "clínicamente está consensuado que la dosis de 5 miligramos diarios evita el 85% de los defectos del tubo neural".
Fusaro indicó que el ácido fólico "juega un rol importante en la prevención de los defectos del tubo neural, que se dan cuando éste no se cierra correctamente".
Males congénitos
"El tubo neural es una estructura cilíndrica presente en el embrión donde se origina el sistema nervioso central, el cerebro y la médula espinal. Los defectos del tubo neural incluyen un gran número de malformaciones congénitas producidas cuando queda abierto", dijo.
Al respecto, enumeró que esos defectos "pueden abarcar desde una abertura pequeña en el conducto vertebral posterior, que no presenta ninguna complicación, hasta la falta de cierre de todo el tubo, que produce el tipo más grave de defecto".
Por tal motivo, el ginecólogo puntualizó que "la gravedad de dichos defectos varía, lo cual hace que todos los casos sean únicos desde el punto de vista clínico" y agregó que "si el tubo neural no se cierra en la porción superior, el bebe se gesta con anencefalia. Si no se cierra en la porción inferior, puede ocasionar lo que se conoce como espina bífida".
"El ácido fólico trabaja a nivel celular para sintetizar ADN (acido desoxirribonucleico) implicado en la transmisión genética y también para sintetizar ARN (ácido ribonucleico) y necesario para formar las proteínas que participan en distintos procesos celulares. El ácido fólico es indispensable para la correcta división y duplicación celular en la gestación", concluyó Fusaro. (Especial)
El ginecólogo es quien explicará los tiempos, ordenará estudios de rutina para conocer el estado de salud general de la mamá y contestará todas las dudas de los futuros padres.
Según indicó David Fusaro, médico ginecólogo, director médico del Instituto Ginecológico de Buenos Aires, "aquellas mujeres que deseen ser mamás deben tener en cuenta que muchas veces deben modificar u ordenar ciertos comportamientos que ayudan a llevar un embarazo saludable".
"Se recomienda que no fumen, tengan una dieta sana, rica en verduras, frutas y proteínas, hagan actividad física y visiten a su obstetra, quien seguirá el embarazo hasta el momento del parto", aseguró Fusaro.
La primera consulta
El especialista puso de relieve que la primera consulta previa a estar embaraza "es clave", ya que el ginecólogo indica el inicio de la toma de ácido fólico.
"Si bien el ácido fólico es una vitamina que se encuentra presente en el organismo de todas las personas en dosis muy bajas, para el momento del embarazo es imprescindible el refuerzo de ácido fólico en comprimidos dado que es la vitamina que colabora en el cierre del tubo neural del bebé. Este cierre ocurre en las primeras semanas de la gestación", detalló.
En ese sentido el ginecólogo remarcó: "clínicamente está consensuado que la dosis de 5 miligramos diarios evita el 85% de los defectos del tubo neural".
Fusaro indicó que el ácido fólico "juega un rol importante en la prevención de los defectos del tubo neural, que se dan cuando éste no se cierra correctamente".
Males congénitos
"El tubo neural es una estructura cilíndrica presente en el embrión donde se origina el sistema nervioso central, el cerebro y la médula espinal. Los defectos del tubo neural incluyen un gran número de malformaciones congénitas producidas cuando queda abierto", dijo.
Al respecto, enumeró que esos defectos "pueden abarcar desde una abertura pequeña en el conducto vertebral posterior, que no presenta ninguna complicación, hasta la falta de cierre de todo el tubo, que produce el tipo más grave de defecto".
Por tal motivo, el ginecólogo puntualizó que "la gravedad de dichos defectos varía, lo cual hace que todos los casos sean únicos desde el punto de vista clínico" y agregó que "si el tubo neural no se cierra en la porción superior, el bebe se gesta con anencefalia. Si no se cierra en la porción inferior, puede ocasionar lo que se conoce como espina bífida".
"El ácido fólico trabaja a nivel celular para sintetizar ADN (acido desoxirribonucleico) implicado en la transmisión genética y también para sintetizar ARN (ácido ribonucleico) y necesario para formar las proteínas que participan en distintos procesos celulares. El ácido fólico es indispensable para la correcta división y duplicación celular en la gestación", concluyó Fusaro. (Especial)
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