01 Noviembre 2009
Las altas temperaturas que en los últimos días superaron los 40º C, sumadas a casi medio año de sequía, han convertido a Tucumán en un infierno en el que falta agua potable. Al mismo tiempo, se multiplican los incendios en campos, en cerros y en pastizales. Ayer, según datos del Laboratorio Climatológico Sudamericano, el mercurio marcó otro récord, cuando alcanzó los 41,3º. La última marca histórica para un 31 de octubre se había registrado en 1916, con 41º C. Para hoy, se pronostica una máxima de 39º C.
En cuanto a los incendios, este año se triplicaron los siniestros, especialmente en los últimos tres meses, cuando los bomberos tuvieron que intervenir en más de 1.000 quemas.
En cuanto a los incendios, este año se triplicaron los siniestros, especialmente en los últimos tres meses, cuando los bomberos tuvieron que intervenir en más de 1.000 quemas.
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