Una holandesa promociona a los artesanos de la montaña

Llegó al país en 1978 y se enamoró de Cafayate, donde produce vinos. También diseña casas de campo con estilo artesanal que alquila a veraneantes.

GASOLEROS. El asado ($ 9 el kilo) es el elegido de los acampadores. LA GACETA GASOLEROS. El asado ($ 9 el kilo) es el elegido de los acampadores. LA GACETA
06 Febrero 2006
Salió de su Holanda natal con la intención de buscar su destino. Y nunca imaginó que iba a echar raíces en Cafayate. Maud Rouppe van der Voort llegó al pueblo salteño en 1978, desde Bolivia. Desde entonces, sus cerámicas, sus tejidos, los vinos que fabrica junto a sus hijos Sacha y Camilo Huayra, y las casas de campo que ella misma diseña y alquila forman parte del paisaje de la villa.
En su casa, en la Banda de Arriba, funciona el taller cultural “Utama”, que ella creó. El nombre es una palabra aimara que significa “tu casa”, y designaba las viviendas donde los habitantes del altiplano se reunían a tomar chicha.
Allí están expuestas las producciones de cerámica de sus hijos y los vinos pateros que hacen en la pequeña bodega en la que los tres trabajan.

Los gauchos

“Estudié arte en una escuela de Amsterdam. Después, salí a recorrer el mundo buscando un lugar. Cuando estaba en Bolivia, escuché hablar de los gauchos y del norte argentino, y me vine para acá. Ahora me quiero morir en este lugar”, aseguró.

Turismo cultural
Además de sus inquietudes culturales, Maud le da mucha importancia al turismo.
Ella misma diseña casas de campo con estilo artesanal que alquila a veraneantes. Cada una de las casas tiene capacidad para 12 personas y tiene una pileta.
Maud, junto a otros artesanos de la zona, creó un recorrido turístico a través del cual los visitantes pueden  conocer las producciones de los artesanos de Cafayate.
“El taller Utama es una exposición permanente donde están las producciones de mis hijos. Además, los turistas pueden comprarlas”, explicó la mujer. En el predio también está la bodega en la que producen vinos pateros  en barricas de roble francés.

Distintas actividades
“Desde que llegué a Cafayate practiqué distintas actividades. Hice tejidos, cerámica y también dulces en cooperativas con mujeres y con comedores infantiles. En los últimos años retomé el contacto con Holanda, con el interés de dar a conocer la zona”, explicó Maud.
Además, está intentando armar un catálogo con las producciones y las características de los artesanos de la zona para publicarlo en internet.