
Cristina Fernández

La salud de Cristina Fernández de Kirchner continúa bajo seguimiento médico en el Sanatorio Otamendi, donde permanece internada tras haber sido intervenida quirúrgicamente por un cuadro de apendicitis aguda con peritonitis localizada. Según el último parte oficial difundido por el centro de salud, la ex mandataria presenta una “lenta recuperación”, por lo que continuará hospitalizada mientras completa el tratamiento indicado.
El comunicado, firmado por la directora médica del sanatorio, Marisa Lafranconi, detalló que “la Dra. Cristina Fernández de Kirchner continúa su evolución del cuadro de apendicitis aguda con peritonitis localizada” y precisó que “la paciente presenta una lenta recuperación del íleo posoperatorio”. En ese marco, se informó que permanece con drenaje peritoneal y bajo tratamiento antibiótico endovenoso.
Asimismo, desde el Otamendi señalaron que la ex presidenta “comienza con ingesta de semisólidos con buena tolerancia” y aclararon que, de no mediar nuevas complicaciones, se mantendrá la internación hasta completar la recuperación del cuadro abdominal, retirar el drenaje y finalizar el esquema antibiótico.
De acuerdo con información a la que accedió Infobae, los especialistas indicaron que el cuadro que atraviesa la presidenta del Partido Justicialista suele ser transitorio y, en general, se resuelve con tratamiento de soporte, que incluye reposo intestinal, control estricto de líquidos y monitoreo permanente de la evolución clínica.
Cristina Kirchner, de 72 años, fue trasladada al Sanatorio Otamendi el pasado 20 de diciembre luego de sufrir intensos dolores abdominales en su domicilio del barrio porteño de Constitución, donde cumple arresto domiciliario. Tras una primera evaluación médica, se le realizaron estudios complementarios y se autorizó una cirugía de urgencia, que fue llevada adelante con autorización judicial. Según trascendió, la intervención se desarrolló sin complicaciones.
Desde el inicio de la internación, la evolución clínica estuvo marcada por controles permanentes, administración de antibióticos endovenosos y la colocación de un drenaje peritoneal, con el objetivo de reducir los riesgos derivados de la infección y de la complicación intestinal detectada posteriormente.
En los últimos días, se le practicaron estudios complementarios, entre ellos una tomografía computada de abdomen, que confirmó el diagnóstico de íleo postoperatorio. Frente a este cuadro, el equipo médico implementó medidas de soporte habituales, como el ajuste del tratamiento antibiótico y el control del balance hídrico, a la espera de una resolución espontánea.
El Sanatorio Otamendi es un centro médico de referencia habitual para la ex mandataria. En 2021, Cristina Kirchner fue sometida allí a una histerectomía, y anteriormente también recibió atención en ese establecimiento. En 2013 fue intervenida en el Hospital Universitario de la Fundación Favaloro por una colección subdural crónica, y en 2012 se le extirpó un tumor de la glándula tiroides en el Hospital Universitario Austral de Pilar. En otras oportunidades, además, permaneció internada por cuadros de menor complejidad en distintos centros de salud del Área Metropolitana de Buenos Aires.
La ex vicepresidenta cumple actualmente prisión domiciliaria en su departamento del barrio de Constitución, tras la condena dictada en la causa conocida como “Vialidad”. El 10 de junio, la Corte Suprema dejó firme el fallo de la Sala IV de la Cámara de Casación Penal que la condenó a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos, además del decomiso de aproximadamente 84.000 millones de pesos.
En paralelo, en los últimos días se registraron muestras de apoyo por parte de militantes kirchneristas, que se autoconvocaron frente al Sanatorio Otamendi y colocaron banderas y pancartas con consignas como “Cristina Libre”, visibles en las inmediaciones del establecimiento médico.







