
Escándalo en la AFA: quién es Javier Faroni, el productor teatral que pasó a manejar negocios millonarios vinculados al fútbol
Empresario del espectáculo, exdiputado bonaerense y dueño de la ticketera que comercializa las entradas de la Selección, su nombre aparece ligado a firmas clave del esquema comercial del fútbol argentino.
EN LA MIRA. Javier Faroni amplió su perfil empresarial en los últimos años y sumó protagonismo en el negocio vinculado al fútbol.

El nombre de Javier Faroni empezó a circular con fuerza en el mundo del fútbol argentino a medida que avanzaron las investigaciones periodísticas sobre el manejo de los ingresos comerciales de la Asociación del Fútbol Argentino. Hasta hace no mucho, Faroni era conocido casi exclusivamente por su rol como productor teatral y empresario del espectáculo. Hoy, su perfil aparece asociado a dos piezas clave del engranaje económico que rodea a la selección campeona del mundo.
Según reconstruyó una investigación publicada por La Nación, Faroni es el dueño de Deportick, la ticketera que desde 2023 comercializa las entradas para ver a la selección argentina, y mantiene además un vínculo directo con TourProdEnter LLC, la empresa designada por la AFA como agente comercial exclusivo para el exterior, encargada de recaudar millones de dólares por sponsoreo, derechos y eventos internacionales.
La relación entre Faroni y el presidente de la AFA, Claudio Tapia, no es nueva ni casual. En enero de 2023, en plena temporada teatral de Mar del Plata, Tapia apareció sorpresivamente en el escenario del teatro donde se representaba la obra “El divorcio”, producida por Faroni. El ingreso del titular de la AFA con la Copa del Mundo de Qatar 2022, al ritmo de “Muchachos”, fue celebrado como un gesto festivo. Sin embargo, con el paso del tiempo, ese episodio quedó resignificado porque Tapia había sido invitado por el propio productor, con quien mantiene una relación personal.
Faroni, que integró el directorio de Aerolíneas Argentinas durante el gobierno de Alberto Fernández y fue diputado bonaerense por el Frente Renovador, espacio liderado por Sergio Massa, comenzó a tener una presencia cada vez más visible en el negocio del fútbol. Meses después del episodio en la costa atlántica, la AFA anunció que la nueva ticketera para los partidos de la selección sería Deportick, una plataforma privada que pasó a gestionar la venta de entradas para ver en vivo a Lionel Messi y a los campeones del mundo.
Deportick no surgió de la nada. De acuerdo con la investigación, se trata de un nombre de fantasía registrado por la empresa Mastea 123 S.A., una sociedad creada en 2018 por el propio Faroni junto a su pareja, Érica Gillette, y su hermana Marcela Viviana Faroni. En 2021, la firma cambió su razón social, pero mantuvo el control familiar. Incluso, el dominio deportick.com.ar figura registrado a nombre de la hermana del productor.
Antes de quedarse con el negocio de la selección, Deportick ya trabajaba con clubes del fútbol argentino como Tigre y Temperley, y había prestado servicios para la Conmebol y la Liga Profesional en eventos puntuales. Sin embargo, el salto fue abrupto porque pasó de operar a escala local a manejar uno de los activos más codiciados del fútbol argentino, la venta de entradas de la selección nacional.
DESDE MIAMI. Faroni junto a Erica Gillette, señalada como administradora de una de las empresas autorizadas por la Asociación del Fútbol Argentino para operar en el exterior. x
Las fuentes consultadas por La Nación señalan que la AFA eligió a Deportick por una propuesta económica considerada más conveniente que la de otros jugadores del mercado. Pero, en paralelo, aparece otro dato fundamental: el entramado comercial de Faroni no se limita a la ticketera.
Un año antes de Qatar 2022, el comité ejecutivo de la AFA aprobó un contrato con TourProdEnter LLC, una empresa con sede en Florida, administrada por Gillette. Por decisión directa de la conducción de la AFA, esa firma quedó habilitada como “Agente Comercial Exclusivo para el exterior”, es decir, la encargada de canalizar cualquier acuerdo de sponsoreo, patrocinio o explotación comercial de la marca AFA y de sus selecciones fuera del país.
Según el boletín oficial del organismo, TourProdEnter gestiona contratos comerciales, y también eventos, logística y promoción internacional. En los hechos, toda empresa extranjera interesada en asociarse a la selección argentina debía pasar por esa estructura.
La investigación periodística reveló que, entre 2022 y 2025, TourProdEnter movió más de US$260 millones en cuentas bancarias de Estados Unidos. Al mismo tiempo, en los balances oficiales presentados por la AFA ante la Inspección General de Justicia, la empresa figura como la principal deudora del organismo, con una deuda superior a los $13 mil millones.
El nombre de Faroni volvió a cruzarse con el fútbol internacional en agosto de 2024, cuando adquirió el 80% del Perugia Calcio, un histórico club italiano que milita en la Serie C. Su desembarco en Europa, sin experiencia previa en la gestión deportiva, sumó otro capítulo a un perfil empresario que se expandió rápidamente del teatro al fútbol. En las últimas semanas, incluso, el dirigente recibió una sanción en Italia por no cumplir con la obligación reglamentaria de conformar un equipo de fútbol femenino.
El recorrido de Faroni muestra cómo un productor teatral con vínculos políticos y personales fue ganando espacio en el negocio del fútbol argentino, primero desde la venta de entradas y luego desde la recaudación internacional. En el actual contexto judicial que rodea a la AFA, su nombre aparece asociado a decisiones comerciales que hoy son observadas con lupa por la Justicia y los organismos de control.







