RESULTADO. La marihuana incautada en la casa de “Petiso David”.
Walter “Petiso David” Lobos se enteró de los allanamientos en su contra mientras se encontraba internado en un sanatorio privado. Se recuperaba de una intervención quirúrgica renal, de complicaciones derivadas de un bypass gástrico y de una afección cardíaca. Antes de regresar al penal de Benjamín Paz, donde se encuentra alojado, fue informado de que estaba siendo investigado, junto con varios integrantes de su familia, por lavado de activos provenientes del narcotráfico.
“Es una verdadera locura esa acusación, más aún si se trata de fondos generados por drogas. Él nunca estuvo involucrado en esa actividad”, indicó su defensor, Augusto Avellaneda. “Está procesado por una causa inventada por policías de la Unidad Regional Norte que hoy están detenidos. Ya se demostró que la marihuana que le encontraron en su casa es la misma que se secuestró en otro procedimiento”, agregó el abogado.
Los casos
El fiscal Agustín Chit, que lleva adelante la investigación junto con un equipo coordinado por la auxiliar Julia Vitar, sumó un dato clave: acumuló todas las causas por drogas en las que Lobos está o estuvo investigado desde 2012.
El primer expediente se inició en 2012, en Salta. Un hombre detenido con un cargamento de cocaína identificó a “Petiso David” como una persona que compraba droga en Orán para luego transportarla hacia Tucumán y Córdoba. Según esa causa, personal de Gendarmería Nacional no solo confirmó la versión, sino que también determinó que utilizaba un Fiat Siena, registrado a su nombre, para el traslado. Los pesquisas establecieron además que empleaba viviendas ubicadas en Yerba Buena, Banda del Río Salí y la capital tucumana.
Entre 2015 y 2017, en el Juzgado Federal de Orán se acumularon otras tres causas contra Lobos. En una de ellas, según consta en un expediente al que LA GACETA tuvo acceso exclusivo, fue vinculado al transporte de siete kilos de cocaína, procedimiento en el que fueron detenidos su ex pareja Sandra Tejerina y otros dos hombres, identificados como Pedro Orquera y Juan Carlos Brizuela.
RECUERDO. Walter Lobos y su pareja en la puerta de la hacienda Nápoles, el refugio de Pablo Escobar.
A través de escuchas telefónicas se determinó que Orlando “Pelado” Miranda era el proveedor de droga de “Petiso David”. Según la investigación, los estupefacientes eran trasladados a Tucumán. Lobos quedó involucrado tras una discusión que mantuvo con su ex pareja, María Valeria Linch, quien también es investigada por lavado de activos. La última investigación en la que aparece involucrado en esta jurisdicción es llamativa: “No tengo plata narco ni vendo drogas como vos”, le habría dicho la mujer, según consta en el expediente.
En Córdoba, durante 2015, se abrieron dos causas contra “Petiso David”. De acuerdo con las investigaciones, fue señalado como líder de una organización dedicada a la comercialización de estupefacientes en esa provincia. Según la pesquisa, tenía como socio a Dante Astorga y utilizaba a su ex pareja Tejerina como “valijera”, es decir, la encargada de transportar la droga.
En 2020, la Justicia Federal de Tucumán comenzó a investigarlo como presunto integrante de una red de narcomenudeo liderada por Juan José “Tato” y Jonathan “Cuchi” Tagles, familiares de Claudia Noemí Tagles, ex esposa de Lobos.
El 2 de octubre pasado, por primera vez, se encontró droga en la vivienda del acusado de liderar la organización. Fue procesado y actualmente cumple prisión preventiva por tenencia de estupefacientes con fines de comercialización.
Pero eso no es todo. En el marco de la investigación, el fiscal Chit descubrió que en distintas causas se menciona a Lobos como usuario de vehículos vinculados a operativos de tráfico de drogas. “Se documentaron relaciones con proveedores y transportistas del norte argentino. Entre 2012 y 2022, su nombre apareció de manera recurrente en registros de la Regional NOA de la Procuraduría de Narcotráfico, Gendarmería Nacional y la Policía de Seguridad Aeroportuaria, siempre en relación con investigaciones por tráfico de cocaína o pasta base”, se lee en el expediente.
Un interrogante
¿Por qué Lobos nunca fue procesado? Es una pregunta que admite varias respuestas. La primera confirma la falta de comunicación entre funcionarios judiciales de distintas jurisdicciones. Al iniciar la pesquisa en diciembre de 2022, el fiscal Chit solicitó informes para avanzar en la causa. De manera fragmentada, fue recibiendo datos de investigaciones iniciadas en otras provincias. Lo que parecía un trámite de rutina se fue complejizando y recién un año después el representante del Ministerio Público logró reunir toda la información.
“No debería ser así, pero es habitual que ocurra. No hay entrecruzamiento de datos”, explicó un pesquisa de una fuerza federal. “Eso también está vinculado a la escasez de personal en varias jurisdicciones, especialmente en Tucumán. Pero atención: ese problema no es exclusivo de la Justicia; dentro de las propias fuerzas también hay desconfianza y falta de intercambio de información”, añadió.
Orán es la jurisdicción donde se abrieron la mayor cantidad de expedientes contra “Petiso David” y también donde se destaparon casos de corrupción. El ex juez federal Raúl Reynoso fue condenado a 13 años de prisión por favorecer procesalmente a narcotraficantes que operaban en la zona. El mes pasado no solo se amplió la acusación en su contra, sino que además se confirmó el procesamiento de José Luis Bruno, ex fiscal federal de esa jurisdicción. Las causas por las que fueron investigados coinciden con las fechas de apertura de expedientes vinculados a Lobos.
En este contexto comenzaron a surgir indicios sobre posibles vínculos políticos de los investigados. Según la investigación, Sofía Ana Pampone Míguez y Giselle Rocío Lobos, esposa e hija de “Petiso David”, eran empleadas estatales, aunque no se especifica en qué reparticiones. Algunos sospechan que podrían haber sido designadas en la Legislatura. “Como lo venimos haciendo desde hace bastante tiempo, toda persona que esté involucrada en este tipo de casos será dada de baja”, aseguró el gobernador Osvaldo Jaldo.










