

Un operativo de emergencia desarrollado en la siesta de este martes en Las Cejas terminó con un desenlace alentador: un niño de ocho años, identificado como S.A.D., fue rescatado en perfecto estado de salud después de caer dentro de un pozo en desuso con una profundidad aproximada de cinco metros. La intervención estuvo a cargo de personal policial que actuó con rapidez para salvar al menor.
Según informó el comisario mayor Mario Herrera, jefe de la División Bomberos de la Policía de Tucumán, el episodio ocurrió alrededor de las 15.50, en una vivienda del barrio Julio A. Roca.
El niño jugaba sobre la tapa de un pozo en desuso cuando parte de la estructura cedió, provocando su caída. Al llegar, los efectivos de la comisaría local constataron que el menor estaba contenido por su madre, aunque comenzaba a ponerse nervioso debido a que se encuentra dentro del espectro autista.
Frente a la urgencia y al estado emocional del niño, los policías tomaron una determinación que resultó clave: iniciar una excavación paralela al pozo para acceder al menor desde un lateral más seguro. Sin medir las consecuencias y con maniobras de riesgo, el personal cavó hasta generar un hueco que permitiera el ingreso.
Tras un arduo trabajo, el cabo Patricio Gerez logró introducirse en el interior y, junto al resto del equipo, completó la extracción del menor, quien salió del pozo sin lesiones físicas. Luego de ser contenido nuevamente por su madre, y por el cabo Cristian Valdez, el niño fue trasladado al CAPS de Las Cejas, donde recibió la atención médica correspondiente.
El comisario mayor Herrera destacó la valentía y velocidad de los efectivos que intervinieron, subrayando que el rescate fue posible gracias a su iniciativa y compromiso, aun sin ser personal especializado en tareas de bomberos.







