Qué hace y cómo vive Carlos Nair Menem, el hijo del ex presidente argentino
A sus 43 años, Carlos Nair Menem disfruta de una vida más tranquila junto a su pareja Priscila Bella, alejado de los escándalos del pasado. Hoy se centra en su familia, su emprendimiento de moda y su pasión por el motociclismo.
Qué hace y cómo vive Carlos Nair Menem, el hijo del ex presidente argentino
A sus 43 años, Carlos Nair Menem, hijo del expresidente Carlos Saúl Menem y de Martha Meza, se muestra lejos de los escándalos que marcaron su pasado mediático. En esta nueva etapa, el joven atraviesa un período de mayor estabilidad personal y afectiva junto a su pareja, la empresaria colombiana Priscila Bella.
Según revelan allegados, Carlos Nair optó por un perfil más bajo: evita el asedio de los medios, las salidas nocturnas y los conflictos públicos. La relación con Priscila le permitió encontrar equilibrio y compartir intereses como los autos, las motos y la vida familiar. Además, convive con la hija adolescente de su pareja, con quien mantiene un vínculo cercano y armonioso.
Qué hace y cómo vive Carlos Nair Menem, el hijo del ex presidente argentino
En el plano laboral, Carlos Nair está involucrado en un emprendimiento de moda que incluye remeras y buzos, impulsado por la hija de Priscila, y continúa vinculado al mundo del motociclismo, su gran pasión. La etapa actual también incluye un enfoque en el cuidado personal: sigue un tratamiento psicológico, mantiene un plan nutricional y expresa el deseo de ser padre nuevamente antes de los 50 años.
A pesar de este momento de tranquilidad, Carlos Nair mantiene un conflicto judicial con su hermana Zulemita Menem, derivado de una causa por hostigamiento que le impide mencionarla públicamente. Este episodio generó incluso una breve condena de 15 días de arresto domiciliario tras desobedecer la restricción durante una entrevista televisiva.
Reconocido legalmente como hijo de Carlos Menem en 2011, luego de un largo proceso de filiación, Carlos Nair fue una figura constante en la farándula y la política argentina de la década de 2000. Hoy, prefiere mantener un perfil más discreto, centrado en su pareja, su familia y proyectos personales, dejando atrás la exposición mediática que caracterizó sus años anteriores.







