
El swap con Estados Unidos aporta liquidez pero, ¿por cuánto tiempo?

El reciente acuerdo con Estados Unidos y la activación de un swap por 20.000 millones de dólares generaron expectativas en los mercados, en medio de un escenario económico marcado por la incertidumbre electoral. Sin embargo, el economista Bernabé Salas, integrante de Federalismo y Libertad, planteó en LA GACETA reparos sobre la efectividad de estas medidas en ausencia de cambios estructurales.
“Las elecciones siempre generan algo de ruido, pero mis cuestionamientos van más hacia el esquema completo, sobre todo el cambiario, que al tema electoral”, sostuvo.
Explicó que estos swap “tradicionalmente se activan por tramos, otorgan liquidez y oxígeno al corto plazo”, pero advirtió que si no se corrigen los problemas de fondo, “en algún momento se pondrá en cuestión lo que se le pidió al Fondo, los dólares que tenías y los que ahora llegarían con el swap”.
SWAP. El Banco Central trata de fortalecer las reservas internacionales.
En esa línea, el economista señaló que la sostenibilidad de la estrategia dependerá de una reforma cambiaria: “Si esto no viene acompañado de un cambio en el esquema, la sostenibilidad a mediano y largo plazo sigue siendo una cuestión a resolver”.
También se refirió al mercado cambiario y a la política oficial. “Caputo dice que se mantendrán las bandas de flotación, pero el mercado no le cree del todo si realmente va a ser así o si habrá cambios después de las elecciones. Eso también genera ruido con el dólar”, apuntó.
Para Salas, las inyecciones puntuales de divisas ayudan a estabilizar momentáneamente la situación, pero no resuelven los desequilibrios. “Ese veranito de cuatro días que tuvimos tras el anuncio del swap se terminó rápidamente. A la semana ya estábamos otra vez cerca de la banda superior. Inyecciones de dólares puntuales colaboran con oxígeno al corto plazo, pero la sostenibilidad requiere reformas de fondo, como las que justamente pide el Tesoro de Estados Unidos”.







