La Libertad Avanza: ¿es suficiente con Milei para sumar votos en las provincias?

La votación en Corrientes dejó tela para cortar en un año electoral. Los resultados favorecieron de lleno al oficialismo provincial que lidera el gobernador Gustavo Valdés, cuyo hermano, Juan Pablo Valdés, ganó por una diferencia de más de 30 puntos. La Libertad Avanza (LLA), partido que se ilusiona con pintar de violeta Buenos Aires mañana y de conquistar decenas de bancas en las nacionales, quedó en el cuarto puesto con menos de 10 puntos.

¿Qué lecturas se hacen al respecto? ¿El resultado correntino puede repercutir en otra provincia, como Buenos Aires o Tucumán? ¿Puede tomarse como un indicador para las legislativas del 26 de octubre? Los politólogos Carlos Fara, Alexandra Morales y Gabriel Garat brindaron sus reflexiones a LA GACETA. Mencionaron que si bien el clima nacional influye en los comicios, las realidades locales son las que terminan definiendo resultados. De todos modos, dejaron en claro que los resultados de Corrientes no son extrapolables a todo el país. En cuanto a la performance del espacio libertario, coincidieron: la figura de Javier Milei parece no ser suficiente para traccionar votos en comicios provinciales o sin candidatos fuertes.

El presidente de la International Association of Political Consultants (IAPC) subrayó que lo que sucedió en Corrientes no tiene incidencia sobre lo que pueda pasar en Buenos Aires. De todos modos, sí hizo una lectura puntual respecto al partido de Milei. “Lo que marca es una LLA que con la marca sola, además de tener un candidato poco conocido (Claudio Lisandro Almirón), no mueve el amperímetro”, dijo. Consideró también que, en un clima contrario al oficialismo nacional y en una provincia con mucha incidencia en empleo público como Corrientes, el discurso de motosierra genera temor y no favorece.

De cara a lo que se viene en Buenos Aires (se eligen legisladores provinciales, concejales y consejeros), Fara advirtió que LLA llega en un mal momento. A su vez, dijo que “no parece haber como un espacio de castigo a la casta” como el Gobierno viene planteando, y marcó que en Corrientes hubo una participación ciudadana por encima del 70%.

Sin traslado matemático

La politóloga Morales, por su parte, consideró que los comicios correntinos son una muestra de la fuerza política provincial que pueden llegar a tener los gobernadores. Consideró que, de cara a octubre, pone nuevamente en relevancia dos ejes: llevar la discusión hacia la agenda provincial, hacia temáticas mucho más locales, o intentar capitalizar la campaña desde lo nacional, como intenta LLA, con temas nacionales.

“Lo vemos reflejado en la campaña que está llevando adelante en Tucumán el gobernador, que habla de Tucumán primero; quieren que lo que termine tomando preponderancia sea lo local sobre lo nacional”, dijo la socia de la consultora Meraki. Y continuó con una diferencia de lo que sucederá en Buenos Aires: “se ve atravesada por todas las temáticas a nivel nacional y, además, los grandes líderes -o por lo menos los grandes protagonistas- a nivel nacional tienen mucha vinculación con estas estructuras partidarias que van a competir, por lo cual la sí o sí la campaña y la elección de Buenos Aires va a ser diferente al resto de las provincias”.

La también máster en Marketing Político y Comunicación mencionó que, de acuerdo a las encuestas, LLA esperaba que el 50% que apoya a Milei se transforme en voto (sólo el 30% es su núcleo duro). “El traslado no es matemático y, sobre todo, el candidato tiene incidencia. Las personas no solamente votan a la estructura partidaria, sino también que, en determinados casos, el candidato tiene relevancia. En Corriente vimos un candidato que no era muy conocido, que no tracciona, entonces no fue suficiente para poder potenciar quizás aquella base que ya era representativa de La Libertad Avanza. Es probable que en Tucumán tengamos un escenario similar, si bien las encuestas dan a LLA cerca del oficialismo; hay que ver cómo se traslada ese voto que sí sería para Milei, pero no para el candidato que elijan”, señaló. En la provincia, Federico Pelli encabeza la nómina libertaria.

El valor del candidato

Garat, en tanto, señaló que desde 2023 hay una dinámica que se viene respetando: cuando se disputa el poder local, los oficialismos provinciales logran contrarrestar los flashes de Milei a nivel nacional. “No se impone de manera total, pero sí termina pesando más. En 2023, donde se peleaban gobernaciones en simultáneo o cerca de las nacionales, a LLA le fue peor que en los lugares que decidieron desdoblar. Cada provincia es un mundo y tiene dinámicas absolutamente particulares”, marcó.

Respecto a la estrategia de LLA de que el candidato local represente a Milei, el analista político consideró que no parece ser suficiente dado los resultados que se dieron en Corrientes. “Parece ser que con eso no alcanza. Se subestima mucho la instalación de un candidato, pero si la gente no te conoce, no te elige. Hay algo de influencia también en el sistema electoral. Un poco se va diluyendo el fenómeno de arrastre del partido”, dijo.

En cuanto a la contienda nacional que tendrá lugar en Tucumán con cuatro bancas para Diputados en juego, Garat señaló que se trata de provincializar la disputa y que, en ese contexto, Pelli queda en el medio de una disputa entre Osvaldo Jaldo (Tucumán Primero) y Roberto Sánchez (Unidos por Tucumán). “Me parece que la campaña de LLA se va a ir centrando mucho más en redes y en otro tipo de tejidos, porque en el idioma tradicional de la política, en canales tradicionales vamos a tener instaladas dos personas: Jaldo y Sánchez, que pueden discutir uno a uno y que tienen más referencias en la sociedad. Mientras más se provincialice, más le va a costar decir a LLA que Pelli y es Milei, por lo tanto, menos tracciona la figura de La Libertad Avanza”, explicó el politólogo.