Alerta por estafa en Gmail.
Las estafas virtuales cada vez encuentran menos limitaciones y las plataformas donde ocurren estos ataques son de lo más variadas. En esta ocasión, una estrategia maliciosa no solo incluye a plataformas sumamente utilizadas como Gmail, sino que además recurre a las debilidades de tecnologías avanzadas como lo es la inteligencia artificial, dando lugar a un engaño de lo más sofisticado.
La Asociación Finlandesa de Telemarketing advirtió sobre una nueva modalidad de estafa que encontró vulnerabilidades en la inteligencia artificial de Gmail, Gemini, que hace poco fue incorporada a la plataforma. Los delincuentes lograron diseñar una estafa "invisible" que puede afectar a las cuentas bancarias rápidamente e incluso robar información sensible en pocos minutos.
Una estafa invisible
Esta modalidad incluye formas sofisticadas, donde el usuario apenas puede discernir que se trata de un engaño. No hay un enlace o un botón que encienda las alertas. Se trata de un mensaje donde los estafadores insertan un código de color blanco que el usuario no ve, pero que la inteligencia artificial sí interpreta.
Este código "invisible" es capaz de alertar a Gemini, que elabora una notificación falsa. Esta alerta indica que la contraseña de Google quedó expuesta y sugiere llamar a un número de atención al cliente. Según detallan desde un informe de TN, el peligro está en que es número no pertenece a l soporte de Google, sino a los mismos estafadores.
La llamada, además, suele ser de pago. Y ahí no termina el peligro: los delincuentes aprovechan para manipular a la víctima, pedirle datos personales o guiarla hacia sitios web fraudulentos.
¿Por qué esta estafa es tan eficaz?
El presidente de la asociación, Arto Isokoski, explicó que “técnicamente, se trata de un método de trampa sencillo”, pero muy efectivo. El truco de adjuntar avisos ocultos tiene precedentes donde se buscaba engañar a los motores de búsqueda, pero ahora la inteligencia artificial lo vuelve mucho más creíble y engañoso.
“La eficacia de la estafa reside en que resulta fácilmente creíble para quienes confían en el resumen elaborado por el servicio”, advirtió Isokoski. Es decir, el usuario confía en la advertencia porque viene de la propia IA de Google, sin sospechar que todo fue manipulado por un código oculto.
Qué hacer ante esta situación
La principal recomendación ante cualquier tipo de estafa es desconfiar, sobre todo si se trata de un mail que sugiere llamar a un número de atención al cliente y que aparece en resumen generado automáticamente. Google nunca pide datos personales ni contraseñas por teléfono ni por correo electrónico.








