La conmoción por la muerte de Alejandra "locomotora" Oliveras, sumó un inesperado giro en las últimas horas. A poco de haberse realizado el velatorio en la Legislatura de Santa Fe, donde una multitud se acercó para rendirle homenaje, la Justicia ordenó suspender su cremación a raíz de una denuncia presentada en torno a las circunstancias de su fallecimiento.
El deceso de la ex campeona mundial, ocurrido el lunes pasado, se produjo apenas dos semanas después de sufrir un accidente cerebrovascular isquémico. Según el informe médico difundido oficialmente, la causa final fue un paro cardiorrespiratorio derivado de una embolia pulmonar. Sin embargo, la denuncia realizada por Aldo Parodi, con asesoría de la abogada Patricia Noemí Apesteguy, obligó a frenar el proceso.
Aunque los motivos concretos no fueron detallados, desde el Ministerio Público Fiscal señalaron que la cremación del cuerpo “podría comprometer la obtención de evidencia relevante para el establecimiento de los hechos vinculados al fallecimiento”. Esto abre la posibilidad de que se practique una autopsia para esclarecer si hubo otros factores o responsabilidades que aún no han salido a la luz.
Por el momento, la familia de la excampeona no ha emitido declaraciones públicas y permanece en estado de conmoción por la pérdida de una de las figuras más carismáticas del deporte argentino. La noticia de su muerte no solo sacudió al mundo del boxeo, sino también a toda la comunidad santafesina, donde Oliveras era un emblema.
Mientras se define cómo continuará la causa, crecen las expectativas sobre una posible investigación judicial que podría arrojar nuevas conclusiones. Lo cierto es que la figura de la “Locomotora” sigue generando impacto incluso después de su partida.






