Lucrecia Martel, en el Festival de Venencia: “hay que revisar el pasado”

Se estrena la película sobre Chocobar que se realizó en esta provincia entre 2018 y 2025.

“NUESTRA TIERRA”. El film se proyectará en la sección principal. “NUESTRA TIERRA”. El film se proyectará en la sección principal.
28 Julio 2025

“Agradecemos al festival de Venecia poder mostrar esta película en la que hemos trabajado tantos años”, dijo Lucrecia Martel al saber que Alberto Barbera, director artístico de dicho festival, había confirmado que “Nuestra Tierra” tendrá su estreno mundial dentro de la selección oficial, en la sección Fuori Concorso (Fuera de Competencia). “Estamos en momentos de gran desorientación como humanidad, necesitamos revisar el pasado. El futuro es algo que podemos volver a inventar. No hay vida para nadie sin lugar para vivir”.

“Nuestra Tierra” es el quinto largometraje de la directora salteña, y su primer trabajo documental.

La película está enfocada en la historia real del indígena Javier Chocobar, líder de la comunidad Diaguita‑Chuschagasta, asesinado en 2009 durante un conflicto por la tierra ancestral frente a un terrateniente.

El proyecto, originalmente conocido como Chocobar, fue filmado entre 2018 y 2025 y contextualiza el asesinato dentro del marco de los cinco siglos desde el descubrimiento, la conquista y la colonia en América Latina, explorando los sistemas de propiedad de la tierra que persisten hasta hoy.

Martel trabaja el guion junto a la directora y actriz María Alché. fue apoyado por instituciones como Sundance, Cinereach y Locarno, además de diversas productoras internacionales.

El caso

Cuando Martel empezó el proyecto en 2018, se lo conocía como Chocobar, centrado en la figura de Javier y el caso. A medida que creció, el proyecto evolucionó a una reflexión más amplia sobre la historia y los colonos, y finalmente adoptó el título “Nuestra Tierra” para su presentación oficial en los festivales.

Se trata de un documental híbrido -ensayístico, político, profundamente poético- que se sumerge en el asesinato del comunero diaguita Chocobar, ocurrido en Tucumán, para narrar algo mucho más vasto: la violencia estructural que atraviesa la historia de la tierra en Argentina; el cambio de nombre señala un gesto estético y político: no se trata solo de una biografía ni de un crimen impune, sino de una mirada crítica sobre el sistema de distribución territorial que sigue vigente desde la colonia hasta hoy.

En “Nuestra Tierra”, Martel no busca reconstruir los hechos con una lógica policial, sino desandar los discursos que los sostienen.

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