17 Julio 2025 Seguir en 
Un insólito accidente aéreo tuvo lugar la noche del lunes en el Aero Club Chivilcoy, ubicado sobre el kilómetro 165,5 de la Ruta Nacional N° 5, en la provincia de Buenos Aires. Una avioneta que realizaba un vuelo nocturno impactó contra un toro Aberdeen Angus colorado que había ingresado a la pista de aterrizaje tras forzar un alambrado de un campo vecino. El animal murió en el acto, mientras que los dos ocupantes de la aeronave resultaron ilesos.
El episodio ocurrió mientras la avioneta, una Tecnam, ejecutaba la maniobra conocida como flare, es decir, la fase final del aterrizaje donde se reduce la velocidad vertical para un descenso suave. En ese momento, el toro apareció en plena pista y fue embestido por la aeronave, que se desvió bruscamente sin llegar a volcar.
La aeronave era piloteada por Tomás Archo, de 39 años y oriundo de Villa La Angostura, quien viajaba junto a Lucas Lancelotti, domiciliado en Pilar. Ambos fueron asistidos en el lugar por una unidad del SAME y trasladados al hospital municipal de Chivilcoy por precaución. Tras algunas horas de observación, fueron dados de alta sin presentar heridas de consideración.
Un toro cruzó en busca de alimento y provocó el accidente
Según explicó Sebastián Benítez, presidente del Aero Club Chivilcoy, el toro pertenecía a un establecimiento rural lindero y había derribado un alambrado de siete hilos en busca de alimento y agua. “El alambrado estaba en condiciones, hicimos un recorrido preventivo. Pero el campo del animal no tenía pasto, y cruzó porque del otro lado sí encontró”, detalló en declaraciones a Radio Chivilcoy.
Benítez también explicó que la aeronave “iba a unos 100 km/h” al momento del impacto, una velocidad común durante el aterrizaje. “Por suerte no fue un impacto frontal. Si lo hubiera sido, el motor se habría desplazado hacia atrás y el accidente podría haber sido mucho más grave”, subrayó.
Vuelos nocturnos y medidas de seguridad
El predio del aeroclub cuenta con una pista habilitada por la ANAC para vuelos nocturnos, aunque desde la institución remarcaron que no organizan este tipo de operaciones de manera directa. En este caso, el vuelo pertenecía a una escuela privada de aviación.
Si bien no hubo participación directa del Aero Club, el incidente encendió alarmas tanto en el ámbito aeronáutico como en el sector agropecuario. El cruce del animal evidenció la necesidad de reforzar las medidas de seguridad en las zonas de transición entre espacios rurales y operativos, para evitar nuevos episodios de este tipo.
“El evento no es habitual. Es un caso con muy baja probabilidad estadística, pero que deja varias enseñanzas sobre los riesgos compartidos entre el entorno rural y la actividad aérea”, concluyó Benítez.
Por el momento, la avioneta permanece en el aeroclub a la espera de una inspección técnica para evaluar los daños estructurales. El toro fue removido horas después del accidente y no se descarta que haya responsabilidades compartidas por parte del establecimiento rural.
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