UN LÍMITE EN FRANCIA. El Senado quiere limitar el consumo en plataformas de "fast fashion" como Shein y Temu. / CAPTURA DE PANTALLA
Francia acaba de dar un paso fuerte contra el modelo de consumo acelerado: con 337 votos a favor y sólo uno en contra, el Senado aprobó una ley que busca limitar el poder de plataformas como Shein y Temu, conocidas por ofrecer ropa muy barata a costa de un alto impacto ambiental. Las nuevas reglas incluyen ecotasas, restricciones a la publicidad y sanciones para influencers que promocionen este tipo de productos. Antes de esta norma, la agencia antimonopolio francesa había multado a Shein con 40 millones de euros por prácticas comerciales desleales consistentes en incrementar precios antes de aplicar “descuentos” o en anuncios de ofertas que no eran reales.
La investigación que motivó la multa impuesta a Shein reveló que el 57% de los descuentos no ofrecía un precio más bajo, el 19% era menor que el anunciado y el 11% incluso implicaba aumentos. La empresa reconoció las fallas y dijo haber corregido el sistema, según la prensa francesa. El sitio de la compañía indica que Shein es un minorista online global de moda y estilo de vida "comprometido con hacer que la belleza de la moda sea accesible a todo el mundo": "ttilizamos tecnología de fabricación bajo demanda para conectar a los proveedores con nuestra ágil cadena de suministro, reduciendo el desperdicio de inventario y permitiéndonos entregar una variedad de productos asequibles a clientes de todo el mundo. Desde nuestras oficinas globales, llegamos a clientes en más de 150 países".
Los puntos clave de la nueva ley francesa
- Impuesto ecológico: hasta 10 euros por prenda en 2030, según su impacto ambiental.
- Sistema de puntuación ecológica: medirá emisiones, reciclabilidad y materiales.
- Prohibición de publicidad: las marcas sancionadas no podrán hacer campañas en Francia.
- Influencers en la mira: quienes promocionen a Shein o Temu podrán ser penalizados.
Moda rápida en la Argentina: entre descuentos, likes y conciencia
Aunque Shein no tiene sede física ni operaciones formales en la Argentina, su impacto es enorme. Jóvenes y adolescentes compran desde su app o web aprovechando precios bajos y los envíos que esquivan impuestos. Temu, su competidora china, también comenzó a ganar terreno.
En las redes sociales, los haul reviews (videos que muestran compras) y los códigos de descuento de influencers son clave para su popularidad. Según Kantar, el 52% de jóvenes argentinos entre 18 y 24 años compró ropa online en los últimos seis meses, y Shein figura entre las plataformas más mencionadas.
Mientras tanto, crecen alternativas como ferias vintage, moda circular y emprendimientos sustentables, aunque siguen siendo un nicho frente al volumen de la fast fashion.
Francia marca un precedente en Europa. La ley debe pasar por una comisión mixta en septiembre y, luego, ser validada por la Comisión Europea. Si se aprueba en su totalidad, podría inspirar regulaciones similares en otros países. ¿El modelo ultra low cost tiene los días contados? Francia ya adelantó algunos casilleros en esa dirección.







