Por Lucía Lozano
30 Junio 2025
La suspensión de clases en todas las escuelas públicas y colegios privados de la provincia debido a la intensa ola de frío polar que afecta a gran parte del país generó opiniones divididas. La pregunta que muchos se están haciendo por estas horas es: ¿qué pasa en las escuelas de Tucumán para tomar una medida de este tipo?
“Lo mejor que hicieron es no exponer a los chicos con semejante frío. En Tucumán, las escuelas no están preparadas para estas heladas ni para las temperaturas extremas que tenemos en verano”, sostuvo Flavia Cisneros, que manda a sus hijos a una escuela de Tafí Viejo. Ella ya tomó una determinación, más allá de lo que después decidan las autoridades: no piensa mandarlos en toda la semana. Volverán directamente después de las vacaciones de julio. “Hay muchísimos casos de gripe, las aulas no tienen calefacción y la situación no está para gastar en médicos y en remedios”, resumió.
Aunque haya establecimientos calefaccionados, a Irene García le preocupa el trayecto de sus dos hijos adolescentes desde Villa Carmela hasta el centro, donde asisten a clases. “Aquí el problema son los medios de transporte. Esperar el colectivo más de media hora, expuestos a tanto frío, es una pesadilla. Dentro de los ómnibus van todos amontonados, exponiéndose a los virus de otras personas enfermas”, resaltó. “Prefiero que mis hijos falten y no que terminen internados con problemas respiratorios”, evaluó.
A pesar de que se registraron temperaturas muy bajas, hubo quienes cuestionaron la decisión de suspender las clases. Consideraron que en otras provincias donde el clima es mucho más duro que aquí no se cierran las escuelas.
"Se termina perjudicando a los chicos"
¿Era necesario aplicar una medida tan drástica?, se pregunta Carina Mondino, de la red tucumana de Familias y Padres Organizados por la Educación. “Hay provincias que tienen situaciones climáticas mucho más extremas y no suspendieron las clases”, remarcó.
Según sostuvo, aquí el problema de fondo es que muchos establecimientos no están en condiciones para recibir a los chicos porque no se ha pensado en invertir en la infraestructura necesaria para afrontar estas situaciones. “En vez de tomar las medidas pertinentes a tiempo, a comienzos de año, hoy se termina perjudicando a los chicos, que tienen derecho a recibir una educación”, recalcó.
Hay docentes que han denunciado falta de mantenimiento, en muchas escuelas: no solo falta calefacción, hay aulas con vidrios rotos o sin puertas. “Espero que después de esta medida arbitraria, salgamos a refaccionar las escuelas porque la educación tiene que ser una prioridad y esto no puede volver a pasar. El gran problema de Tucumán es el calor, no el frío extremo”, apuntó.
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