
El Gobierno provincial convocó a los gremios estatales para dar inicio a la séptima rueda de recomposición salarial de la gestión de Osvaldo Jaldo, y la segunda en lo que va de 2025.
En la previa, representantes de los trabajadores advierten sobre el impacto de la inflación en los salarios, mientras en el Poder Ejecutivo (PE) señalan que hubo una caída en los ingresos por Coparticipación por la baja en el consumo.
A partir de las 8.30, el equipo encabezado por los ministros Regino Amado (Gobierno y Justicia) y Daniel Abad (Economía y Finanzas) espera en la Casa de Gobierno, por tandas, a los secretarios del Frente Gremial Docente, de UPCN, de ATE, del Frente Gremial Estatal (municipios y comunas) y de la Unión de Gremios Estatales.
Habrá reuniones a lo largo de toda la semana, con una agenda “comprimida” por los dos feriados no laborables. Por ello, miércoles y jueves las audiencias en principio serán mañana y tarde, a fin de cerrar la apertura de la ronda de conversaciones.
Amado explicó a LA GACETA que, además de lo salarial, en el Gobierno toman nota sobre los problemas que plantean desde los gremios. “Sabemos que hoy en día preocupa la pérdida del poder adquisitivo, que es algo a nivel nacional. Y en segundo lugar está el tema de la seguridad en el trabajo”, dijo. Y marcó que esto se da en un contexto de cierre de organismos en la Nación.
En ese sentido, destacó la gestión económica de la Provincia, en cuanto a que a nivel local hubo “ajustes”, pero no mediante la eliminación de reparticiones que “prestan función en distintas áreas”. “Por ejemplo, se hizo el retiro voluntario”, añadió.
A la vez, recordó que hubo una caída generalizada en los ingresos provinciales por la caída en los recursos coparticipables, como el IVA. “Eso es un problema”, confesó. Y aunque aclaró que la revisión de los números es competencia del ministro Abad, anticipó que la prioridad es mantener el equilibrio en las cuentas públicas. “Eso también permite asegurar la tranquilidad del personal en sus puestos de trabajo”, añadió.
Hugo Brito, secretario general de ATEP y miembro del Frente Docente, aseguró que tienen expectativas de que el PE “contemple la situación que estamos viviendo”. “Es un momento muy difícil, sobre todo por las imposiciones del gobierno libertario”, afirmó. Aseguró que hay predisposición por “llegar a un acuerdo que nos permita continuar con las clases y seguir trabajando”, aunque a la vez existen varios asuntos a tratar en agenda, como la revisión de la inflación del primer semestre y la definición sobre si la próxima rueda de negociación es a tres meses o hasta fin de año, entre otros puntos. “Es la primera charla. La expectativa es recomponer lo que venimos perdiendo”, acotó.
Preocupaciones
Ante una consulta de LA GACETA, Brito sostuvo que los docentes “estamos muy por debajo de la Canasta Básica Total (CBT). “Tenemos un mínimo de $700.000”, dijo. Según el Indec, el mes pasado y a nivel nacional, un matrimonio con dos hijos requirió $ 1.110.624 para no ser pobre; mientras que la Dirección de Estadística de la Provincia (DEP) estimó esa cifra en $940.850. “Esa es una de las preocupaciones -prosiguió Brito-. Pero también somos conscientes de la realidad que atraviesan las provincias, con los gobernadores reclamando recursos a la Nación. Es un escenario de crisis total, y lo que para el Gobierno nacional es superávit, para nosotros es ajuste. Sabemos que la baja en la inflación se sostiene con la necesidad del pueblo”.
Lucinda Espeche, secretaria general de la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN), afirmó que su sector llega con la intención es sentarse a dialogar con los ministros Amado y Abad y comenzar a estudiar “en qué consiste la propuesta” del Gobierno. “Será una primera conversación”, marcó. De todos modos, la referente gremial remarcó que los estatales “estamos muy bajos de sueldo”. Y apuntó que “los trabajadores de ninguna manera” cubren la Canasta Básica Total. “Nosotros estamos cobrando seiscientos mil y pico, no creo que se llegue a $700.000, porque además la mayoría tiene créditos o utiliza la tarjeta, y nadie sabe al final cuánto cobra. No alcanza para nada”, insistió Espeche.
El Gobierno provincial había anunciado esta nueva cita con los gremios tras el pago del medio aguinaldo al personal del Estado. Según estiman en el PE, entre los haberes de mayo, el SAC y junio -que se abonará hasta el 6 de julio- se va a inyectar un estimado de $340.000 millones a la economía.