Hay algo de atractivo en las personas seguras de sí mismas, de sus aspiraciones y de sus posicionamientos. A veces su firmeza puede funcionar como un imán que atrae inevitablemente las miradas de quienes las rodean. Un psicólogo explicó cómo funciona y por qué las personas con una buena autoestima son más deseables.
El Diccionario de la Real Academia Española define la autoestima como una valoración generalmente positiva de sí mismo. Desde una acepción más próxima a la medicina, el sitio Top Doctors de España la define como “la capacidad que tiene una persona de valorarse, amarse y aceptarse a sí mismo”.
Relacionarse con personas de autoestima alta
Reconocer a una persona con autoestima alta a veces puede resultar contradictorio. Si este rasgo es exacerbado, se puede pasar de un momento a otro de la admiración a la pedantería. Sin embargo, el psicólogo especialista en atracción Hugo Hernández explicó cómo funcionan las relaciones con este tipo de personas y por qué resultan atractivas.
En primer término, el experto plantea que es un error creer que el físico es el principal indicador que despierta nuestra atención en otra persona. “La ciencia ya ha demostrado de sobra que el físico no es el único elemento importante en nuestro atractivo y que de hecho hay otra variable más importante”, señala.
Esa variable es la autoestima y, según explica, es “una variable personal que determina en gran medida quién nos gusta y quién no”. De allí que las personas que tengan más o mejor autoestima llamarán más la atención que las personas con baja autoestima. Las primeras son vistas como parejas más estables y atractivas.
Beneficios de estar en pareja con una persona de autoestima alta
Uno de los puntos a favor es la seguridad que ofrecen los vínculos con personas de autoestima saludable. “Sabemos que las relaciones de personas con autoestima sana son más estables y satisfactorias, con menor tendencia a la dependencia emocional y a la inseguridad”, explica Hernández.
Explica también que estudios demostraron que las personas con alta autoestima se eligen con mayor frecuencia mutuamente que a personas que no compartan este rasgo. Así, las personas con baja autoestima quedan “descartadas” frecuentemente. Es por eso que en terapia lo primero que se debe trabajar es el fortalecimiento del autoestima afectada, señala el psicólogo y reflexiona: “Intentar coquetear con la autoestima dañada es como intentar correr una maratón rengos”.