13 Junio 2025 Seguir en 
Una forma de comer pizza sin harina de trigo.
Durante el fin de semana, nadie puede decirle no a una deliciosa pizza. Este plato italiano es para muchos el protagonista de las cenas de viernes y sábados. Pero si estás cuidándote, comiendo saludable o haciendo algún tipo de dieta, esta pizza es perfecta que tenés que aprender a hacer.
Lo bueno de la pizza es que todos sus componentes pueden variar por algo más saludable. El sabor cambia levemente, pero siempre podés seguir buscando opciones que sean de tu agrado. Lo primero que cambiaremos en este caso para evitar usar el horno será el harina de trigo por harina de avena o avena en copos.
Las otras dos cosas que pueden cambiar por algo más sano son la salsa y los toppings. Los agregados pueden ser tantos y tan saludables como quieras. Pero con la salsa es indiscutible: para que sea lo más liviana posible, debe prepararse en casa y la mejor manera de hacerla es agregando solamente tomate, algo de sal y un chorrito de aceite de oliva.
La pizza más saludable: fácil y sin horno
Preparar esta pizza será bastante sencillo. Estas cantidades son para preparar pizzetas por unidad. Esto implica que se debería calcular una por persona, aproximadamente; dos si son personas de buen comer. El ingrediente indispensable para esto es la avena. Si estás acostumbrado a usarla, te dará igual elegirla en copos o en harina. Pero, si no te gusta o no es familiar la textura de la avena en copos, es recomendable que la uses en su formato harina.
También necesitarás un huevo para ligar los ingredientes y un chorrito de agua tibia. Para hacerla un poco más esponjosa se necesitará una cucharadita de polvo de hornear. El resto de los ingredientes serán simplemente para darles sabor, por lo que podrás usarlos en la cantidad que quieras. Estos son sal, orégano y ajo en polvo.
Paso a paso para hacer pizza de avena sin horno
1. En un recipiente mezclar la avena con los ingredientes secos, esto es, los condimentos y el polvo para hornear. Revolvé lo suficiente como para que se dispersen bien.
2. Agregá el huevo y volvé a mezclar. Cuando esté todo integrado, podrás agregar un chorrito de agua, lo suficiente como para que la masa quede completamente ligada.
3. Pasá la preparación a una licuadora y licuá durante un minuto. Si está lo suficientemente cremosa según tu gusto, podés dejarla así. Si no, seguí licuando.
4. Pincelá una sartén con una capita de aceite y calentala durante algunos minutos. Cuando esté lo suficientemente caliente, verté la mezcla poco a poco para formar un círculo.
5. Cociná de un lado. Da vuelta y agregá la salsa encima. Después agregá el queso y tapá la sartén para que se termine de gratinar. En los últimos minutos, agregá los toppings. Los recomendados son rúcula, tomate Cherry y jamón.
Cuando todo esté caliente, tu pizza saludable estará lista para servir.
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