En un acto cargado de tensión política y simbología histórica, Cristina Fernández de Kirchner encabezó este lunes en la sede del Partido Justicialista (PJ) un homenaje a las víctimas de los fusilamientos de José León Suárez, en el marco del Día de la Resistencia Peronista. Con la militancia movilizada y la dirigencia peronista en alerta ante versiones de una posible proscripción judicial de su candidatura, la expresidenta pronunció un discurso que dejó varias definiciones fuertes.
Estas son las diez frases más destacadas:
"Yo soy una fusilada que vive"
Con una fuerte carga emotiva, Cristina se identificó con las víctimas del peronismo perseguido y reivindicó su supervivencia política pese a la persecución judicial: "No me va a alcanzar la vida para agradecerle a Dios".
"Los peronistas estamos acá y seguiremos estando acá"
En contraste con lo que llamó "la derecha mafiosa", la expresidenta subrayó la permanencia del peronismo frente a quienes intentaron proscribirlo: "Nosotros no nos profugamos tres años".
"Estar presa es un certificado de dignidad"
En alusión a las causas judiciales en su contra, Cristina sostuvo que su eventual encarcelamiento sería un símbolo de honor político: "Lo siento de esa manera".
"Nadie puede avanzar si no se sabe de dónde viene"
Kirchner reivindicó la memoria histórica como condición necesaria para construir futuro: "Es muy importante esto que estamos haciendo acá: el reconocimiento de nuestra historia".
"Este gobierno cachivache va a fracasar"
En un pasaje de durísima crítica a la actual gestión nacional, la expresidenta vaticinó su fracaso: "Han fracasado históricamente".
"Se están preparando para desarticular la organización popular que necesariamente se va a producir"
Cristina alertó sobre los intentos de los grupos de poder por impedir la reacción social ante la crisis: "La historia demuestra que la gente se termina organizando en defensa propia".
"Hay que discutir qué pasó para que no nos sigan dividiendo inútilmente"
La exmandataria llamó a un debate profundo sobre las causas de la fractura social y política en el país: "Estas divisiones terminan perjudicando a todos los argentinos".
"En esta nueva generación digital se ha instalado que la grieta nació en 2003"
Cuestionó la narrativa que reduce la confrontación política a los años kirchneristas: "Asesinaban gente por ser peronistas mucho antes de eso".
"El rol de cada compañero y compañera tiene una inmensa responsabilidad"
Cristina apeló a la militancia para sostener la organización política y preparar una alternativa: "Organizar y permitir, como lo hicimos en 2015".
"Hay mucho conflicto, demanda y necesidad. Estemos juntos a ellos"
La expresidenta cerró su discurso con un llamado a la empatía social: "Lo mejor que nos sale es ser empáticos y que nos importen los demás".
"Los argentinos tienen que saber que le están mintiendo."
Denuncia sobre el endeudamiento creciente y la inviabilidad del modelo económico actual.
"Ya lo intentaron en los años 70, con el golpe de Estado... eliminaron partidos políticos, sindicatos, 30 mil desaparecidos."
Relación entre la situación actual y la represión de la última dictadura militar.
"Algo que me revienta: cuando discuten el número si son 30.000 o 9.000. Decímelo, ¿dónde están? Manga de descerebrados."
Crítica a quienes relativizan la cifra de desaparecidos.
"Creen que van a solucionar esto metiéndome presa. Hermano, pensá en otra salida. Yo estaré presa, pero el pueblo estará cada vez peor. Y lo saben."
Acusación de persecución judicial y advertencia sobre las consecuencias sociales.
"La grieta la hicieron los gorilas fusilando a cualquiera que pensara distinto."
Mención histórica sobre el origen de la división política en Argentina.
"No hay ningún argentino que pueda decirme sin mirarme a los ojos que es posible crecer en un país que todo el día se endeuda más y más."
Crítica a la política de endeudamiento externo.
El acto dejó en claro la decisión del kirchnerismo de mantenerse en "estado de alerta y movilización" frente a los movimientos judiciales que podrían impedir la candidatura de su principal líder. Las definiciones de Cristina Kirchner marcan el tono de una disputa política que promete escalar en los próximos meses.