“Aguas Blancas es Ciudad Gótica, pero sin Batman”, señaló el interventor de esa localidad salteña Adrián Zigarán. Utilizó esas palabras para protestar por una insólita situación. Antes de que se inaugurara el alambrado de 200 metros para proteger la frontera, los bagayeros comenzaron a utilizar una finca para pasar al vecino país. Sus palabras generaron la reacción de Gendarmería Nacional y ese paso clandestino fue inhabilitado.
En enero del año pasado, con el apoyo de la ministra de Seguridad Patricia Bullrich, se anunció que el gobierno de Salta levantaría ese alambrado para tratar de solucionar el caos que se vivía en esa localidad.
Sin embargo, Zigarán denunció que se había montado una aduana paralela que complicaba el movimiento económico de la ciudad a apenas dos kilómetros del lugar donde se pretendía regularizar el cruce de la frontera. “Se trata de un predio que está en manos de una ciudadana boliviana, cuando está prohibido que los extranjeros sean dueños de terrenos en nuestras fronteras. El alambrado era una cuestión migratoria, no de narcotráfico. De cada 10 bultos, uno viene con cocaína. Dicen que por ahí hasta pasan los autos que son robados en distintas provincias del país y que son vendidos en Bolivia”.
Zigarán, después de denunciar el caso, se comunicó con Bullrich para explicarle lo que sucedía. “Estas personas compraron una finca para recibir a los contrabandistas. Vienen los gomones como si fuera el desembarco en Normandía. No actúan la naval ni la Prefectura Naval Argentina”, declaró. Enviar efectivos de esa última fuerza fue uno de los pasos más importantes que se concretó en el lanzamiento del llamado Operativo Güemes.
Camionetas robadas
“La mercadería va y viene. En Finca Karina se habla hasta de camionetas robadas. Hay todo tipo de ida y vuelta sin el control de absolutamente nadie, ese es el gran problema. En los bultos que baja la gente lamentablemente hay cocaína”, aseguró el funcionario.
“De Puerto Chalanas, en la mercadería que se vio bajar, el 85% cruza en gomones y sale en Finca Karina. También se puede pasar precursores químicos de Argentina hacia Bolivia. Hay una suma de situaciones que es necesario resolver con Nación”, añadió en una nota publicada por el diario “Ámbito Financiero”.
La reacción no se hizo esperar. Días atrás los hombres de Gendarmería bloquearon la entrada y la salida de la finca. Si bien no hubo ningún reporte, esta situación fue confirmada por Zigarán. “Cuentan que hasta se escucharon disparos”, indicó.
“Por este paso se mueven hasta 3 millones de dólares en mercadería sin ningún control. Hace un mes intenté hablar con Nación para ordenar esto. Va a haber problemas”, dijo Zigarán en una nota publicada por el diario salteño “El Tribuno”.








