
La resolución en la que se dispuso el procesamiento de Valentina Olguín, la cantante e influencer santiagueña que fue acusada del robo de datos personales de cinco gobernadores, supone un agravamiento en la acusación que realizó. El magistrado interviniente no creyó en la versión de la joven y consideró que actuó a pesar de que sabía cuáles eran las consecuencias de sus actos.
El caso, que tuvo repercusión nacional, tenía varios interrogantes. En el fallo que dictó el juez Federal José Manuel Díaz Vélez se encontraron varias respuestas. Estas son algunas de ellas:
- ¿Cómo se inició la investigación del caso?
- El gobernador Osvaldo Jaldo descubrió que alguien había importado mercadería a su nombre. Al confirmar que ninguno de sus allegados había realizado el trámite, decidió hacer la denuncia ante el fiscal federal Agustín Chit. Ratificó la demanda y se inició una investigación.
- ¿Qué se descubrió?
- Primero, con la colaboración de la Dirección General de Aduanas, Chit pudo establecer la hoja de ruta de la maniobra. Una persona había utilizado el nombre de Jaldo para adquirir prendas de vestir en una tienda de Miami por el valor de U$S1.280, según las autoridades.
Después de realizar la compra, a través de un servicio courier, habría recibido la mercadería en un departamento del barrio de Núñez, de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. El recibo de los productos había sido firmado por una persona que se identificó como “Valentina”.
Los informes de Aduanas también dieron cuenta de que esa persona había hecho lo mismo con los gobernadores Axel Kicillof (Buenos Aires), Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Sergio Raúl Ziliotto (La Pampa) y Marcelo Orrego (San Juan).
Si bien es cierto que las maniobras fueron realizadas con datos diferentes, el autor no las retiraba personalmente, pedía que le lleven la mercadería a prácticamente los mismos domicilios. Por esa razón lograron identificar a Olguín como la responsable de este hecho.
- ¿Qué se sabe de la joven acusada?
- Es una cantante santiagueña que formó parte de un grupo de cumbia “cheta” y luego decidió probar suerte como solista. Participó en varios recitales importantes cantando una canción con “Q’Locura”. También era una reconocida influencer en la vecina provincia. Cuenta con millares de seguidores en las redes sociales donde se la puede observar en recitales y compartiendo salidas con sus pares. También mostraba las prendas que supuestamente hacía ingresar ilegalmente al país.
Actualmente se encontraría en Buenos Aires preparando un show que fue anunciado para el 7 de junio. Especialistas señalaron que por la difusión que tuvo este caso, multiplicó considerablemente su número de seguidores.
- ¿En qué perjudicó a los gobernadores?
- El único perjuicio es limitar la disponibilidad de realizar compras en el extranjero. Según las normas vigentes, cualquier argentino puede hacer hasta cinco operaciones al año siempre y cuando no superen el monto de U$S 5.000. Pero la maniobra se cometió el año pasado cuando el límite primero era de U$S 1.000 y después de U$S 3.000.
Según trascendió, Olguín utilizó todo el cupo de Jaldo y de Ziliotto, cuando en principio era de U$S 1.000. En el caso de Kicillof fueron cuatro, en el de Frigerio y Orrego, una sola.
Jaldo, hasta el momento, fue el único que hizo declaraciones sobre el caso. Pidió a la Nación que tomara mayores recaudos para proteger a la comunidad de este tipo de robos. “Está en riesgo cualquier habitante de esta provincia y del país. Les sugiero que controlen estas cuestiones para no ser sorprendidos”, aseguró el gobernador de Tucumán.
- ¿Cuál fue el descargo de Olguín?
- En su declaración hubo dos cuestiones fundamentales. La primera, que reconoció haber utilizado los datos personales de los gobernadores para realizar esta operación, pero después dijo que no sabía quiénes eran. También aclaró que ella no importaba la ropa, sino que había conseguido un canje por U$S 2.000 anuales. Es decir, la empresa le entregaba vestimenta por ese monto a cambio de que la difundiera a través de las redes sociales.
También indicó que se vio obligada a realizar esta maniobra luego de haber ocupado su cupo, el de su familia y el de sus allegados. Explicó además que los artículos eran para uso personal y no para venderlos. Por último denunció que varias de las encomiendas que había realizado antes fueron retenidas indebidamente en la Aduana.
La joven también dijo que los ingresos que tiene son de las actuaciones que realiza en todo el país. En el allanamiento que se hizo en el departamento de CABA, las autoridades encontraron más de U$S 16.000. Ella explicó que ese era el dinero que cobró por una reciente actuación que había realizado en Uruguay.
Relató además que recibe regalías de Youtube y Spotify, plataformas a las que subió sus videos y canciones y que hasta abril pasado tenían más de 2 millones de reproducciones. Por último, mencionó que tiene contratos con más de una decena de empresas (cervezas, prendas de vestir y de snacks) por promocionar sus productos.
- ¿De qué se la acusó?
- El fiscal Chit señaló que la joven había utilizado nombres falsos para importar mercadería generando un daño al fisco. Por eso la acusó de contrabando simulado y el juez interviniente le dio la razón, aunque agravó aplicando la figura de dolo eventual.
“Olguín utilizó una identidad que no le correspondía, para simular ante la Aduana, y poder ingresar así la mercadería de importación. En cuanto al elemento subjetivo, cabe mencionar y conforme se dijera, que no se requiere un dolo directo, sino un dolo indirecto (dolo eventual), ello toda vez que la encausada sabía que estaba realizando una acción que podía llegar a tener consecuencias; y, sumado a que los elementos de importación se encontraban en su poder”, aseguró el juez federal Díaz Vélez en la resolución en la que dictó su procesamiento sin prisión preventiva y le trabó embargo por $5 millones.
El magistrado rechazó el descargo que hizo Olguín. “No resulta atendible su confesión de haber actuado con irresponsabilidad. Más precisamente dijo que al hacer la búsqueda de los CUIT de políticos, fue al azar y que su actuar fue inmaduro e irresponsable”, destacó en el fallo.
- ¿Qué pasará ahora?
- La palabra ahora la tiene la defensa de la acusada. Primero deberá resolver si apela la resolución del juez Díaz Vélez. Después definir si continuará o no con la iniciativa de buscar una solución alternativa para cerrar el expediente iniciado por la denuncia de Jaldo únicamente. En un principio, la abogada defensora, Claudia Paz, había anunciado que pretendía acceder a una probation, pero esa posibilidad quedó descartada porque la ley impide la utilización de esta figura en delitos aduaneros.
También se debe esperar la resolución de los fiscales federales de La Plata, La Pampa, Entre Ríos y San Juan, ya que el fiscal Chit les envió copias del expediente para que evaluaran los pasos a seguir. Pueden acumularse todas las causas en esta provincia o en Buenos Aires, o tramitarse en cada una de esas jurisdicciones.
Especialistas sostienen que lo mejor que le puede suceder a Olguín es que se unifiquen todos los expedientes para buscar una solución alternativa a través de un juicio abreviado. Ella debería declararse culpable (de hecho confesó el delito cuando fue indagada) y ofrecer una reparación por el daño causado a cambio de recibir una condena de cumplimiento condicional. El delito del fue acusada contempla una pena de entre dos y ocho años de prisión.