El Gobierno de Javier Milei decretó una desregulación de la marina mercante y dio de baja trabas sindicales, lo que implica la apertura del transporte de carga marítimo y fluvial en aguas argentinas a buques y tripulaciones extranjeras. Así fue oficializado este miércoles a través del decreto 340/2025 publicado en el Boletín Oficial.
La medida, impulsada por el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, declara como "servicio esencial" la navegación por agua marítima destinada al transporte comercial, de pasajeros, de carga, servicios conexos y operaciones costas afuera.
El decreto permite la operación de buques con bandera extranjera y que los propietarios, armadores, capitanes o patrones, de barcos de bandera nacional, en caso de no haber disponibilidad de personal argentino, puedan contratar a tripulantes de cualquier nacionalidad.
A través de un extenso mensaje en redes sociales, Sturzenegger celebró la medida y aseguró que la misma reivindica los principios constitucionales de "libertad de navegación y comercio" y moderniza el régimen normativo. "El excesivo reglamentarismo tapó todo, incluso los principios básicos de la Constitución", destacó.
La medida es rechazada, entre otros, por el Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU), que en marzo pasado, ante la posible firma de este decreto, advirtió en un comunicado del "grave perjuicio" para los trabajadores ya que se cambian las condiciones laborales, se prevé la posibilidad de embarcar personal extranjero y que buques extranjeros operen en aguas argentinas y se declara a la actividad marítima y fluvial como "esencial", limitando el derecho a huelga.