22 Marzo 2011
Esta vez no fue como casi todas las otras veces, en las que los paros u otros conflictos gremiales detienen el tráfico aéreo en el país. Ayer, el problema fue técnico y, a pesar de los enojos y las complicaciones que suscitó, la decisión de suspender los vuelos desde y hacia los aeropuertos de Buenos Aires (Aeroparque, Ezeiza y San Fernando) se fundamentó en una cuestión meramente de seguridad.
"Es imposible hacer un vuelo sin comunicación permanente y en ambos sentidos entre las aeronaves y los servicios de control del tránsito aéreo. Sería una locura, porque el piloto no sabría qué es lo que pasa en el aire, a pesar de tener los radares", afirmó Marcelo Persia, jefe del aeropuerto Benjamín Matienzo, de nuestra provincia.
Una falla en el sistema de comunicaciones entre los aviones y la torre de control generó ayer la cancelación de más de 130 vuelos en los mencionados aeropuertos. La situación comenzó a normalizarse en forma paulatina a partir de las 20, según informó Télam. "Esto es algo que no tiene antecedentes en la historia, falló el sistema central, el backup y el segundo backup. Se trata de un sistema canadiense instalado hace 10 años al que se le realizan todos los controles y mantenimientos", dijo a esa agencia un vocero de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC).
Según informó esa entidad el desperfecto se debió a que se cayó el sistema Voice Switching, que permite la comunicación entre la torre de control y los aviones.
"Esto no significa que los aviones quedaron incomunicados, ya que cuentan con otros sistemas, pero por una cuestión de normativa tienen que estar todos funcionando para que se puedan autorizar los arribos y despegues", explicó una fuente aeroportuaria a la prensa.
"Hasta donde se me informó, el problema se desató en Ezeiza, por lo que se entiende que la medida de suspensión se haya extendido a las otras dos aeroestaciones, ya que están dentro del área que se controla desde el aeropuerto internacional", puntualizó por último Persia.
"Es imposible hacer un vuelo sin comunicación permanente y en ambos sentidos entre las aeronaves y los servicios de control del tránsito aéreo. Sería una locura, porque el piloto no sabría qué es lo que pasa en el aire, a pesar de tener los radares", afirmó Marcelo Persia, jefe del aeropuerto Benjamín Matienzo, de nuestra provincia.
Una falla en el sistema de comunicaciones entre los aviones y la torre de control generó ayer la cancelación de más de 130 vuelos en los mencionados aeropuertos. La situación comenzó a normalizarse en forma paulatina a partir de las 20, según informó Télam. "Esto es algo que no tiene antecedentes en la historia, falló el sistema central, el backup y el segundo backup. Se trata de un sistema canadiense instalado hace 10 años al que se le realizan todos los controles y mantenimientos", dijo a esa agencia un vocero de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC).
Según informó esa entidad el desperfecto se debió a que se cayó el sistema Voice Switching, que permite la comunicación entre la torre de control y los aviones.
"Esto no significa que los aviones quedaron incomunicados, ya que cuentan con otros sistemas, pero por una cuestión de normativa tienen que estar todos funcionando para que se puedan autorizar los arribos y despegues", explicó una fuente aeroportuaria a la prensa.
"Hasta donde se me informó, el problema se desató en Ezeiza, por lo que se entiende que la medida de suspensión se haya extendido a las otras dos aeroestaciones, ya que están dentro del área que se controla desde el aeropuerto internacional", puntualizó por último Persia.
Lo más popular
